PROGRESO, Yucatán, domingo 01/03/20.- Cuando aún está fresca la muerte del “Sulub” en una patrulla, ahora Eric Orlando Pastrana Pinto denunció que, “sin ningún motivo” un grupo de policía estatales de la patrulla 6529, lo levantaron y lo torturaron.

El quejoso dijo que lo llevaron fuera del puerto de Progreso, a la altura de  “El Corchito”, lo torturaron, le cubrieron con una bolsa de plástico su cabeza y cara para que no respirara, luego fue brutalmente golpeado, lo lesionaron de la clavícula y le quebraron una costilla.

El afectado indicó que interpuso una denuncia ante la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Yucatán (CODHEY), donde corroboraron y tomaron fotografías de las lesiones, y afirmó que la policía estatal lo acosa.

El miércoles publicamos que, luego del reporte de la muerte de un detenido en una patrulla, dos personas afirmaron que los detuvieron sin razón, que luego también sin motivo bajaron a la fuerza a Gaspar Avelino Sulub Cimé (a) “Sulub” y lo mataron a golpes.

Los “testigos” afirman que unos 10 agentes, entre policías de la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) y municipales del puerto de progreso detuvieron, el lunes, poco después de las 11:00 de la noche, a un costado del “Tecnohotel” al “Sulub”, lo bajaron a la fuerza de un automóvil, y lo golpearon hasta matarlo.

Se dice que “Sulub” era narcomenudista y que se negaba a pagar “derecho de piso” a los policías, de modo que esa pudo ser la razón del levantón, aunque lo raro es que participaron muchos agentes, cuando en casos como éstos las cosas son casi secretas.

El afectado relato que los policías estatales de la patrulla 6529 lo esposaron, y le preguntaron sí sabía que uno de sus compañeros se iba a dar la fuga, pero que al decirles que no sabía nada, los uniformados le propinaron tremenda golpiza en su estómago, y en sus costados, para que confesara.

Según relató, un oficial lo golpeó en reiteradas ocasiones con el antebrazo, le dio en la cabeza, espalda y costado, hasta que le quebraron una costilla, la cual le impedía respirar y moverse, al ver que no podía respirar los oficiales me colocaron una bolsa de plástico en la cabeza para que no pueda respirar y uno de los policías presiono la bolsa sobre mi cara para que más me ahogara.

“Después me llevaron a la comandancia municipal de Progreso, donde no me aceptaron por la golpiza que llevaba y que tenían miedo de que me muera dentro de la cárcel municipal, por lo que les sugirieron que me llevaran a una clínica, pero los policías estatales, no me llevaron y le marcaron a un mando superior para decirle que llevaban a un sujeto golpeado, porque se tiró de una motocicleta”, aseguró Pastrana Pinto.

“Al llegar al corporativo de la Secretaría de Seguridad Pública, nunca me reviso un doctor, me dejaron así con mi costilla rota y quejándome toda la noche con dolor, al día siguiente mi esposa exigió que sea revisado por un médico, pero nunca recibí atención medica”.