CIUDAD DE MÉXICO, lunes 24/02/20.- Autoridades de Ciudad de México investigan el caso de un menor que habría drogado a varias compañeras en una primaria de Coyoacán.

Una madre de familia de la escuela “Julián Adame”, ubicada en la calle Allende de la colonia del Carmen, denunció ante la Fiscalía General de Justicia que su hija de 12 años fue drogada por un compañero que la obligó a comer un “polvo azul”, que le aseguró era un dulce.

Otras cuatro menores también resultaron afectadas por la droga, que luego de un análisis resultó ser “cristal” revuelta con un dulce efervescente que el niño de 12 años mezcló y ofreció a sus amigas.

Por el caso la FGJ abrió una investigación por el delito de “lesiones dolorosas”, pues las jóvenes que comieron el polvo azul terminaron en el hospital.

En la carpeta de investigación consta que el incidente ocurrió el pasado lunes 17 de febrero.

Ese día, a la salida de la escuela, el niño ofreció a sus compañeras la supuesta golosina y les dijo que era un producto nuevo y que lo probaran.

Las niñas aseguran que se negaron, pero el joven insistió y terminaron por ceder.

Luego, ya en su casa, como a las 16:00 horas la joven afectada dijo a su madre que le dolía mucho la cabeza, empezó a sudar y a sentirse muy mal.

Mientras narraba todo eso le daban ataques de ansiedad y de risa, de modo que la madre se asustó y la llevó al médico, quien se percató que la joven estaba intoxicada por una droga desconocida.

Los exámenes revelaron que de consumir un poco más la droga le pudo causar la muerte a ella y a sus compañeras.

Incluso, en el expediente del caso se detalla que la niña tuvo fuertes dolores de cabeza durante 24 horas.

Con esos estudios acudió a la escuela y su madre solicitó a los directivos una acción urgente, sobre todo para ubicar al menor que repartía la droga y así detectaron seis casos similares.

De momento se sabe que autoridades iniciaron un diálogo con los padres del menor acusado para determinar dónde obtuvo el niño de 12 años la droga.

En cuanto a medidas legales no se puede hacer nada contra él, pues es inimputable por su edad.

La situación desató pánico entre los padres de familia, quienes solicitaron que se refuerce el Operativo Mochila y que tutores y maestros estén atentos de los niños.

EL UNIVERSAL