MÉRIDA, Yucatán, jueves 09/01/20.- El crimen del pollero José Alberto Novelo Mis quedaría impune, porque liberaron al policía Juan Diego de Jesús C.M., acusado de matarlo, debido a graves pifias de la Fiscalía General, de modo que ayer liberaron a policía de la PEI.
Dos hay involucrados en este asesinato: La ex mujer de Alberto, Elsa Yesenia, y el policía, pero hasta ahora las autoridades han descartado a la mujer, de modo que al liberar a agente policial ya no hay más sospechosos.
En audiencia, al agente de la Secretaría de Seguridad Pública, adscrito a la Policía Estatal de Investigación, lo dejaron libre por duda razonable por el juez de control Santos Alfredo May Tinal, por el delito de homicidio simple, que se castiga con pena de 10 a 15 años de cárcel. Sin embargo, sigue preso por el delito de ataques y lesiones a funcionario público, ya que atacó al policía que fue a interrogarlo.
Este sujeto fue acusado de golpear y asfixiar a José Alberto, quien tuvo una relación sentimental con Elsa Yesenia T. H., con quien vivía ahora el policía.
Durante la audiencia de vinculación salió a relucir que la Fiscalía cometió una serie de errores que permitieron liberar al acusado de homicidio simple en contra del pollero José Alberto, encontrado muerto en su casa ubicada en la calle 112-A entre 55 y 57 del fraccionamiento “Ciudad Caucel II”, el 27 de diciembre de 2019.
El delito de homicidio simple se castiga con pena corporal que va de los 10 a los 15 años de prisión.
El defensor de oficio Baltasar Cherres Manzanilla presentó un video e imágenes que fueron captadas por las cámaras de seguridad de la SSP y que le proporcionó la Fiscalía.
En las imágenes se ve el vehículo del ahora occiso, un Mazda rojo con placas YYG-659-C, cuando transitaba en el kilómetro 38 del Anillo Periférico, a las 13:41 horas del 27 de diciembre, cuando la hora de la muerte de Novelo Miss se determinó entre las 8 y 10 horas de ese día.
Incluso, en otro video, se ve al auto cuando iba sobre la Avenida Canek, a las 8 de la mañana del 28 de diciembre. Aunque nunca se dijo quien lo manejaba ni se ve al conductor en los vídeos.
El cadáver fue descubierto el 28 de diciembre, en horas de la tarde y el auto estaba estacionado en el porche de la casa, junto con una camioneta con placas de Jalisco.
El defensor mostró unas fotografías del cadáver, al que en el informe médico forense se dice que se le practicó la necropsia el 29 de diciembre, en horas de la noche.
Es más, mostró unas fotografías de las manos de José Alberto, en las que tenía un reloj, que marcaba las 20 horas del 29 de diciembre, es decir, 24 horas después del levantamiento del cuerpo.
Expuso que el policía no tenía motivos para matar al sujeto, que, incluso, el hijo del ahora occiso indicó que quien tenía serios problemas con su padre era la ex pareja sentimental y con la que vivía el ex policía y supuesto técnico en refrigeración, la estilista Elsa Yesenia.
En los primeros días de diciembre, la estilista fue a la casa del sujeto y arrojó un pedazo de block contra el Mazda, al que le rompió el panorámico.
La mujer compareció y dijo que el día de los hechos, el policía salió de su casa, ubicada en Chuburná de Hidalgo, y le dijo que iría a trabajar, pero antes pasaría a arreglar un asunto con “Alberto”, pero que volvió poco después, algo nervioso.
La mujer aseguró que días después encontró bajo de su cama un par de bultos, uno de los cuales era del ahora occiso.
El defensor explicó que la Fiscalía no precisó la mecánica de los hechos que se le imputaban al policía y mucho menos se indicaba eso en el informe policial homologado.
El fiscal del caso argumentó que en tiempo y forma se notificó a la Defensoría Legal la hora correcta de la necropsia; que el reloj pudiera no tener su hora actualizada; que el informe policial estaba acorde con el día que se dieron los hechos, y que hubo una equivocación en las fechas de necropsia.
Dijo que, si bien se veía el Mazda circulando en fechas distintas al descubrimiento del cuerpo, no se apreciaba quién lo manejaba y podría haber sido el acusado y ahora liberado.
Como hubo dudas sobre la participación del inculpado en los hechos, se le dejó en libertad y el crimen podría quedar impune.