VALLADOLID, Yucatán, martes 07/01/20.- Sin vergüenza y con dolo, Julio Alberto Chan Noh vendió un terreno a una constructora, pero después se lo revendió a su mamá, de modo que defraudó al dueño de la constructora, quien lo denunció.

Una vez detenido, el juez de control de Valladolid, José Enrique Sáenz Dzul, lo imputó por el delito de fraude específico, por la venta de la finca rústica “Chumpil” a una constructora y luego revendió el inmueble a su madre.

El juez Sáenz Dzul le impuso las medidas cautelares de presentación periódica consistente en firmar cada 15 días la libreta de control de la agencia Décimo Tercera del Ministerio Público con sede en Valladolid; pagar una garantía económica de 20 mil pesos; la prohibición de salir sin autorización de la ciudad de Valladolid, y la colocación de un localizador electrónico.

La audiencia de vinculación se realizará el jueves 9 de enero.

Fue denunciado por Juan Carlos D.A., presidente del consejo de administración de la persona moral “Tikal Desarrolladora”, Sociedad Anónima Promotora de Inversión de Capital Variable, Sociedad Anónima de Capital Variable.

De acuerdo a la denuncia, el 16 de mayo, Julio Alberto, por medio de una escritura de compraventa, formalizó la venta de la finca rústica “Chumpil”, de 22 hectáreas, ante la titular de la notaría pública número 95, Melba Rosa Peniche Peniche. El precio de la operación fue pagado días antes, según consta en el propio documento.

Es por ello que le fue transmitida la propiedad y posesión a los compradores.

Después, el 1 de agosto pasado, Julio Alberto vendió una segunda vez el terreno a su madre María Concepción N.N. ante el titular de la escribanía pública número 2 con sede en Valladolid, escritura sobre la cual presentó un aviso definitivo de compra venta ese mismo día.

Hasta la presente fecha no es posible registrar la escritura de compraventa realizada con anterioridad.