MÉRIDA, Yucatán, domingo 22/12/19.- Irvin Alejandro Sánchez González se sometió a un procedimiento abreviado y lo condenaron a un año de reclusión, pues es tan terco que no quiere mantener a su hijo.

Este sujeto se ha mostrado extremadamente renuente para cumplir con sus obligaciones como padre, pues antes gozaba de una suspensión condicional de proceso, la cual se revocó al violar los acuerdos y se reanudó el proceso.

Ante esto, el juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda, a petición de las partes, accedió a concluir este asunto, luego que este sujeto fue detenido en dos ocasiones para que responda por el delito de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar.

El juez también le impuso el pago de 20 días multa; reparación del daño de 40 mil pesos; amonestación; pérdida de los derechos de familia, y pérdida de derechos políticos.

Fue denunciado por M.F.A.U., en nombre de su hijo menor de edad de identidad reservada.

Irvin Alejandro tuvo una relación de pareja de cuatro años con la denunciante y ambos vivían en casa de los papás de este sujeto. Procrearon un hijo que nació en octubre del 2013.

Como el ahora procesado estuvo recluido en el Centro de Reinserción Social durante siete meses, del 25 de enero del 2014 hasta el 4 de agosto de ese mismo año, a partir de esa fecha solamente iba a casa de sus papás los fines de semana; terminó la relación con su pareja el 10 de abril del 2016.

Desde ese momento cada quincena compraba mercancía para el niño, por un monto de 810 pesos, pero en mayo del 2015 dejó de darle  este apoyo y mucho menos le daba dinero. Le dijo a su ex ‘pareja que viera cómo hacerle porque él ya no iba a hacerse cargo de ningún gasto para su hijo.