MÉRIDA, Yucatán, martes 10/12/19.- La Orquesta Sinfónica de Yucatán cerrará a lo grande sus XV años de trayectoria, que celebró este 2019, ya que el 13 y 14 de diciembre ofrecerá sendos conciertos en la Sala Nezahualcóyotl y el Centro Cultural “Roberto Cantoral” de Ciudad de México.

Es una forma de ponerle el broche de oro a estos XV años, en los  que se percibe, se siente y se disfruta él movimiento sinfónico en Yucatán, aseguró Miguel Escobedo Novelo, director general del Fideicomiso Garante de la OSY (Figarosy).

En rueda de prensa dijo que lo llena de satisfacción participar en el VIII Festival Artístico de Otoño de la Ciudad de México.

La OSY tendrá la oportunidad de refrendar en la capital del país la calidad de los integrantes y el amplio repertorio que incluye obras maestras de la música, gracias a la invitación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Sociedad de Autores y Compositores de México.

En el repertorio, los músicos incluirán obras de Richard Wagner, Gustav Mahler, José Pablo Moncayo, Arturo Márquez y Javier Álvarez.

Acompañado de la presidenta del Patronato para la Orquesta Sinfónica de Yutacán, Margarita Molina Zaldívar, y del director titular de la OSY, Juan Carlos Lomónaco, Escobedo Novelo agradeció el apoyo de la administración de Mauricio Vila Dosal.

Estaremos en la Sala Nezahualcóyotl, una de las más importante de América Latina, por su arquitectura conceptual y su acústica especialmente diseñada para conciertos, indicaron los directivos.

La OSY interpretará bajo la batuta del maestro Juan Carlos Lomónaco el Preludio “Los Maestros Cantores de Núremberg” y la Obertura Tanhäuser, ambas de Richard Wagner (1813- 1883), así como la Sinfonía No. 4 de Gustav Mahler (1860-1911), cuya parte solista en el último movimiento de la composición será interpretada por la soprano, Irasema Terrazas.

La soprano mexicana es dueña de una privilegiada voz que le ha permitido obtener los primeros lugares de concursos como el Concurso Nacional de Canto “Carlo Morelli”, en el Palacio de Bellas Artes. También ha sido honrada con los premios “Luis Girón May” a la mejor interpretación y el Revelación Juvenil.

Su trayectoria incluye Ópera y Opereta con la Compañía Nacional de Ópera del Instituto Nacional de Bellas Artes y en la Temporada Lírica de Perú con cerca de 30 roles, entre ellos Pamina en “Die Zauberflöte”, Susanna en “Le nozze di Figaro” y Venusen “Ascanio in Alba” de W. A. Mozart.

Escrita para soprano y orquesta, la Sinfonía No. 4 en la que participará la cantante fue compuesta entre 1900 y 1901, siendo Mahler director de la Ópera de Viena. Es una de sus más cortas sinfonías, ya que la duración de sus cuatro movimientos es de unos 50 minutos.

El Maestro Juan Carlos Lomónaco destacó el carácter visionario de dos de las óperas compuestas por Wagner, “Los Maestros Cantores de Núremberg” estrenada en Múnich el 21 de junio de 1868, y Tanhäuser, en Dresde, el 19 de octubre de 1845, y cuyo preludio y obertura interpretará también la OSY.

El concierto del 14 de diciembre será a las 20 horas, en la moderna sala de conciertos del Centro Cultural “Roberto Cantoral”, donde cerrarán el Festival de Otoño.

El programa incluye música mexicana combinada y dos temas de Richard Wagner.

Además del Preludio de “Los Maestros Cantores de Núremberg” y la Obertura Tanhäuser del compositor alemán, la OSY interpretará en el siguiente orden una destacada obra contemporánea, “Y la máquina va” de Javier Álvarez, el Danzón No. 8 de Arturo Márquez y “Huapango” de José Pablo Moncayo.

La inclusión de una obra de Javier Álvarez (1956) da realce al concierto, ya que parte de su música ha sido interpretada por la Orquesta Sinfónica de Chicago, la London Sinfonietta, la Filarmónica de Los Ángeles, la Filarmónica de la Ciudad de México y la propia Sinfónica de Yucatán.

Respecto del ”Danzón No. 8”,  su autor,  Arturo Márquez, quien ha dado muestras de ser un apasionado del género del baile del salón, explicó: tiene que ver con un montuno que se hace en el danzón tradicional, que es el afro, la danza que se explora en ciertos danzones tradicionales como “El teléfono a larga distancia”, o en “Mi destino fue quererte”.

Este Danzón No. 8 tiene que ver también con el aprendizaje de la danza e incluye temas exóticos, españoles y un ritmo con secuencia ascendente, por lo que lleva el subtítulo de Homenaje a Maurice, porque tiene que ver con la idea de “El Bolero” del propio de Maurice Ravel.

El pináculo del concierto de clausura del festival corresponderá al inmortal “Huapango” de Moncayo(1912-1958), “obra emblemática  – refiere el maestro Carlos Chávez-  del nacionalismo musical en México que seguramente seguirá presente porque conecta con un fenómeno natural que es nuestra raíz, nuestra identificación, una cuestión psicológica respecto de lo que somos nosotros”.