MÉRIDA, Yucatán, jueves 28/11/19.- Gracias a sus huellas y foto, se descubrió que el tabasqueño Juan Luis de la Cruz Ascencio (a) “Licho” o “Ulises” robó con violencia, junto con seis sujetos, en una casa de la colonia Itzimná, donde amenazaron y golpearon a un empresario y empleados y se llevaron 100 mil pesos en efectivo.

El juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda lo imputó por el delito de robo calificado cometido con violencia y en pandilla, que denunció el señor Enrique José T. G. y Perla Mary E. P.

Cabe mencionar que el procesado ni siquiera se opuso a que en la misma audiencia fuera vinculado y se programó que el cierre de investigación complementaria se dé en cuatro meses. Se le impuso prisión preventiva oficiosa por todo el tiempo que dure el proceso.

Este tabasqueño, que sólo vino a Yucatán a delinquir, ha participado en numerosos asaltos con violencia a casas, en la venta de narcóticos y estuvo involucrado en el homicidio del narcotraficante Luis Pablo Becerril Quijano, pero después de ser condenado a 12.6 años de cárcel, el Tribunal Superior de Justicia de Yucatán lo absolvió y desde ese entonces se convirtió en un auténtico dolor de cabeza para la sociedad y las autoridades.

A las 9 de la mañana del 8 de junio, seis sujetos llegaron a una casa de la calle 23-A con 25 de la colonia Itzimná y fueron a la parte trasera, donde aguardaron unos momentos, mientras que los demás, entre ellos Juan Luis, llamaron en uno de los portones y fueron atendidos por Cruz C. Q. y aprovecharon un descuido del sujeto y lo empujaron y entraron.

Con pistolas y armas blancas, amagaron a Cruz y la golpearon, hasta derribarla y al caer se fracturó el brazo izquierdo; la amarraron de las manos por atrás de la espalda.

Enseguida fueron al área de lavado de la casa, donde estaba el denunciante, a quien encañonaron, pero éste gritó e intentó defenderse, pero un sujeto empezó a patearlo, mientras los otros lo amenazaron, pero siguió gritando.

Para que se calle, uno lo golpeó en la cabeza y al caer al piso quedó aturdido. Un vecino que escuchó lo que ocurría gritó que ya había llamado a la policía y por eso salieron por donde entraron y se dieron a la fuga.

Sus demás compinches entraron a la casa, por encima de una de las bardas, y subieron al segundo piso, donde entraron a la recámara principal y se apoderaron de una bolsa que contenía 100 mil pesos, así como una caja fuerte.

Cuando bajaban las escaleras se toparon con la señora Cintya Maribel O.K. y un niño 11 años de edad, por lo cual abandonaron la caja fuerte y salieron por el portón, abordaron un Versa y huyeron.

Hasta que ahora se ha capturado y procesado a uno, en espera de detener a los demás.