MÉRIDA, Yucatán, sábado 28/09/19.- Aunque mató a sangre fría a su compañero de parranda, mientras veían por tele una pelea del “Canelo”, al tabasqueño especulador de terrenos Luis Miguel Aguilar Mosqueda (a) “Mocho”, sólo condenaron a 10 años de prisión, cuando la pena máxima es de 40 años.

Esto se debio a que el criminal confeso negoció su condena, al confesar que mató a cuchillazos a su ex socio, en la noche del “Grito” del 15 de septiembre del 2018, cuando veían la pelea del “Canelo”.

De esta forma, el tabasqueño buscó una reducción sustancial a su condena por el delito de homicidio calificado, que se castiga con pena corporal que va de los 20 a los 40 años de cárcel.

La juez de control Suemy del Rosario Lizama Sánchez (a) “a Suavecita” aprobó este beneficio y también condenó, por la vía incidental, a que el tabasqueño repare el daño que ocasionó al asesinar a Rogelio Trejo Zavala (a) “Papo”.

Aunque el asesino confesó, nada más se concluyó que cometió el delito de homicidio calificado con premeditación, no tomándose en cuenta las demás agravantes, como la alevosía, ventaja y traición.

Fue denunciado por la esposa del ahora occiso, la señora Fátima Dzib Pech.

El 15 de septiembre de 2018, la noche del Grito, “Mocho” y “Papo” se reunieron en una casa del primero, ubicada en la colonia San José Tecoh III, para tomar las chelas. Luego, al paso de las horas y por el alcohol ingerido, afloraron las diferencias entre ambos, por la venta de terrenos ejidales que invadían, junto con un grupo de paracaidistas.

En primer lugar, se dieron de puñetazos y el ahora occiso sacó entre sus ropas una pistola “hechiza”, calibre 22, que al intentar accionar para disparar en contra de “Mocho”, no funcionó.

“Mocho” aprovechó la falla y con un cuchillo lesionó a “Papo” en ocho ocasiones en varias partes del cuerpo y una de las heridas atravesó un órgano vital.

Al verse herido, “Papo” se retiró para evitar más agresiones, pero el asesino confeso lo siguió llevando consigo el arma.

Cuando el ahora occiso quedó tirado sobre un camino de terracería ubicado dentro del terreno invadido falleció desangrado.