MÉRIDA, Yucatán, jueves 11/0

MÉRIDA,Yucatán, viernes 12/07/19.- Aunque once años maltrató a su mujer y a sus tres hijos,  Didier Alejandro Trejo García sólo fue vinculado a proceso por el delito de violencia doméstica y el juez de control Kenny Martins Burgos Salazar lo dejó libre.

Este “juzgador” no tomó en cuenta el testimonio de una menor, que fue objeto de constantes abusos verbales y psicológicos de su padre. Tampoco tomó en cuenta el de abuso sexual.

Tampoco accedió a la petición de la Fiscalía de imponerle prisión preventiva como medida cautelar y sólo le impuso que pague una garantía económica de 10 mil pesos; no salir del Estado; presentarse a firmar los primeros cinco días del mes, y no acercarse a las víctimas en un rango de al menos 100  metros, durante el tiempo que dure el proceso.

Este sujeto y la denunciante, de identidad reservada, contrajeron matrimonio civil en 2004 y procrearon tres hijos, que al 10 de junio del 2015 tenían 9, 5 y 1 año de edad; vivieron en varias casas, y la última fue en la calle 30-B entre 71 y 71-A de la colonia Azcorra.

Desde un principio, Trejo García ejerció actos abusivos de poder, pues constantemente insultaba a la denunciante. Debido a que su hija mayor nació con un problema congénito, le recriminaba a la denunciante, que era su culpa, y por cualquier cosa la insultaba. A la menor le decía defectuosa y loca.

Con el paso de los años el trato fue igual o por y cuando nació su tercer hijo continuaba agrediéndolas, incluso a su hija la regañaba mucho y a la denunciante le decía que puros hijos defectuosos le daba.

Un mes antes de la fecha de la denuncia -junio 2015-, las agresiones aumentaron, al grado que logró aislar a la denunciante de sus amistades y su familia, incluso ella y sus hijos no salían si él no iba.

El 10 de junio del 2015, cuando la mujer y sus hijos estaban en un cuarto, le bajó un poco el short y el calzón a la menor, quien se levantó de la cama y se pasó a la hamaca en la que estaba su mamá, a quien le comentó lo que su papá le hizo.

La denunciante decidió salirse de la casa con sus hijos, pues un día antes la niña también fue pateada por su progenitor, que ya le había causado problemas psicológicos.