MÉRIDA, Yucatán, viernes 05/07/19.- La ex gerente de Liconsa Karla Teresa Blancas Pizaña fue sentenciada por el Tribunal Oral Penal de Quintana Roo a 30 años de prisión, por el homicidio intelectual de su esposo, el yucateco Marco Aurelio Gutierrez Velez.
La mujer, quien fue condenada también al pago de una multa por 148 mil 074 pesos, actuó junto con su hermana Luz Gabriela, quien recibió 31 años y tres meses de pena corporal, al ser considerada también autora intelectual del homicidio. Pagará una multa de 150 mil 065 pesos.
El occiso, quien tenía 40 años al morir, fue coordinador de Mercados Públicos y Rastro de Othón P. Blanco en 2013, durante la administración de Carlos Mario Villanueva Tenorio en el Ayuntamiento capitalino.
De acuerdo con los pormenores de la sentencia, los magistrados del Tribunal fijaron una suma de 405 mil 002 pesos por concepto de reparación de daño, que servirá para el mantenimiento del hijo de la ex delegada de Liconsa, dinero que será entregado a los padres de la víctima, quienes mantendrán la custodia del menor de manera temporal.
Sin embargo, la sentenciada tendrá el derecho a convivir con su hijo, salvo que el juez familiar determine lo contrario.
El próximo miércoles a las 19:00 horas se realizará la Lectura de Explicación de Sentencia y a partir de ese momento la defensa tendrá lapso de 10 días para apelar ante el Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE).
Mientras agota todos los recursos legales, la ex delegada de Liconsa seguirá gozando de prisión domiciliaria. Una vez vencidos todos los plazos podría regresar al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chetumal.
Posterior a la Lectura de Explicación de Sentencia, la infractora tendrá cinco días para la reparación del daño. De no cumplir vendrá el proceso de embargo.
El 19 de marzo del 2017, Gutiérrez Vélez fue asesinado en su domicilio situado en la Colonia Campestre de Chetumal.
Ella fue quien encontró el cadáver, que presentaba heridas de arma blanca y golpes en varias partes del cuerpo. También el perro de la casa estaba muerto, pues fue envenenado por el homicida de su amo.
Dijo que llegó a las 5 de la tarde, encontrando a su perro muerto y a su esposo en medio de un charco de sangre, por lo que solicitó ayuda inmediatamente.
Sin embargo, las investigaciones la vincularon con el crimen y fue detenida el 5 de abril. Posteriormente su hermana Luz Gabriela fue asegurada en Cancún el 26 de agosto y vinculada a proceso judicial el 2 de septiembre.
La Fiscalía General del Estado (FGE) les imputó la autoría intelectual del homicidio de Gutiérrez Vélez, el cual fue ejecutado por Raúl Ramos Cruz, vecino de la hermana de la funcionaria federal.
Los autores del homicidio, no contaron con el hecho que los vecinos tenían cámaras de vigilancia, y al entregar las grabaciones se pudo detectar un vehículo que se había estacionado fuera de la casa de la familia Gutiérrez Blancas, de manera que se rastrearon las placas y el propietario fue uno de los primeros en soltar la información.
Dijo que solo llevó al autor material, pero que quienes los había contratado habían sido Luz Gabriela y Karla.
La fiscal del caso, Estela Labastida, procedió a pedir el historial de llamadas de Luz Gabriela y todo coincidía, las comunicaciones entre los autores intelectuales con los materiales era real,
Karla Teresa estuvo más de dos años en prisión preventiva a solicitud de prórroga de la FGE. Pero el 18 de junio obtuvo el beneficio de la prisión domiciliaria.
Luz Gabriela fue trasladada al Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) de Nayarit el 19 de septiembre del año pasado.