MÉRIDA, Yucatán, miércoles 16/12/18.- Aunque carece de la preparación necesaria y es prepotente, soberbia y altanera, César González Arjona, quien fue director del IDEY con Patricio Patrón Laviada impuso a Astrid Novelo Rosas como directora de Alto Rendimiento del IDEY.

De acuerdo con varios entrevistados, esta mujer es una trepadora y una oportunista, a la que Luis Ortega despidió del COMUDE de Guadalajara, debido a que hacía fraude con el dinero de los patrocinadores y cobraba derechos de piso.

Este es un desaguisado más de Carlos Sáenz en el IDEY, en donde colocó a Manuel Cauich Verde como jefe del Departamento de los Centros Regionales del Deporte del IDEY, a quien acusan de una serie de presuntas anomalías y de seguir de periodista y no realizar su trabajo en la dependencia. También se dice que Cauich Verde sólo se dedica a pedirles dinero a alcaldes y aprovecha el puesto para viajar con viáticos y gasolina, para hacer notas para su portal y programa “Al interior del Estado”, en vez de dedicarse al cien por ciento a su encargo.

En este nuevo caso, aunque “presume” un amplio currículum, pues estuvo en el Instituto del Deporte del DF, en la  Dirección de Planeación y Deporte Internacional del Instituto del Deporte del Distrito Federal,  por ahí de enero de 2015, a Astrid Novelo la sacaron por fraude y porque acosaba las empleadas con su forma prepotente y grosera.

Hablaba a nombre del director Horacio de la Vega, queriéndose colgar el éxito del Maratón de la Ciudad de México, cuando nunca hizo nada, ya que este evento tiene años de trascendencia, como el mismo director de la Vega confirmo en entrevista telefónica y dijo que esta persona no sabe construir y sólo destruye, porque no está capacitada.

Luis Ortega, hoy flamante director del CODE Jalisco le pidió a Astrid que renuncie, mucho antes de que termine la administración de ese municipio, y aseguró que nunca la recomendaría y menos la mismo la pondría en Alto Rendimiento.

En entrevista telefónica Luis Ortega afirmó que descartó a Astrid para el gobierno estatal de Jalisco, principalmente por tres razones: No está capacitada, es prepotente y corrupta.

De acuerdo con datos recabados, al llegar al cargo en el IDEY, Astrid se comporta con prepotencia al tratar a los empleados y entrenadores, y a éstos los considera ineptos y mediocres, buenos para nada, de modo que empezó a despedir gente a nombre de Mauricio Vila y por instrucciones de Carlos Sáenz.

“Al despedir a personas ella decía que ya no necesitaban de sus servicios y que su trabajo era una porquería, que porque no tenían título universitario”, indicó un entrevistado quien agregó que gracias a esa porquería de trabajo Yucatán logró durante dos años consecutivos (2017 y 2018) el 4° Lugar Nacional en las olimpiadas.

Nuestro entrevistado dijo que Astrid nunca ha estado en ninguna dirección de Alto Rendimiento, mucho menos es entrenadora de alto Rendimiento y ella mañosamente y con mala leche dice que es entrenadora certificada por la Federación Mexicana de Triatlón, pero sólo tiene un certificado que la federación expide por cursos que ellos imparten, sin importar el nivel que tengas, siempre y cuando pagues el curso.

Lo peor de todo, es que Astrid trajo a su pareja sentimental Marisol Ponciano Flores, a quien impuso como metodóloga en el centro paralímpico, porque supuestamente Marisol tiene mucha capacidad y experiencia como metodóloga de Ciclismo en sillas de ruedas.

“Sin embargo, esto es un insulto al deporte yucateco, ya que ni siquiera hay pista de ciclismo en el Estado y Yucatán ha tenido discretas participaciones en Ciclismo y nunca ha tenido competidores en ciclismo de sillas de ruedas”, precisó otro de los entrevistados.

Astrid impuso a Marisol para que vea a todos los deportistas de discapacidades diferentes, ciegos y débiles visuales, deportistas sordos, con parálisis cerebral, deportistas especiales, con discapacidad intelectual, de olimpíadas especiales, y donde compiten en varias disciplinas deportivas.

Son muchas más las anomalías de esta mujer en la dependencia, de lo daremos a conocer en otra nota.