DZIDZANTÚN, Yucatán, domingo 18/11/18.- Siguen los amantes de lo ajeno haciendo de las suyas, pues ayer sábado, poco antes de las diez de la mañana, un grupo de catequistas al llegar a la capilla la guadalupana, ubicada en la calle 12 con 23, se percataron que habían robado todos los dulces de la tiendita parroquial.

En su cuenta de Facebook Rocío Coral Zaldívar relató que al llegar a la Capilla de Guadalupe como cada sábado para impartir la doctrina sabatina se percataron que todas las cosas de la cocina estaban revueltas y se habían robado $800 en dulces.

Acabábamos de surtir la tiendita, invertimos todo nuestro capital, ahora ya no tenemos nada para el convivio navideño de nuestros alumnos de la doctrina, señaló la catequista.

Lo que más indigna a los parroquianos es el robo de una “estufa” recuerdo del fallecido párroco Tomas Lavalle fundador de la capilla y personaje que fue muy querido entre la población.

Con este atraco ya son dos veces que los ladrones visitan este centro parroquial, la primera vez se robaron el equipo de sonido, valuado en varios miles de pesos, el cual hasta la fecha no se ha podido reponer.

Lo que más tiene indignado a los fieles es que a escasamente 30 metros de la capilla se encuentra una base policiaca y de paramédicos, los cuales nunca se percataron de que en frente de sus narices estaba siendo robada la capilla.

Con este robo se suma uno más, a los tantos ocurridos a menos de tres meses que tomo las riendas de la comuna el alcalde Ismael Aguilar Puc, el jefe de seguridad Gilberto Flores y el director de la policía, el comandante Zapata.