MÉRIDA, Yuc., domingo 24/06/18.- El constructor Michael Medina Alcocer, acusado de fraude genérico, fue beneficiado al reprogramarse la audiencia de imputación que por el delito de fraude genérico se le sigue, por haber recibido dinero construir una casa que nunca edificó.

Ante el juez de control Kenny Martins Burgos Salazar comprobó que no podía acudir a comparecer y se le apoyó.

Sin embargo, a los que no les fue nada bien fue a sus abogados, que fueron multados porque no acudieron a la audiencia programada con anticipación. De esta forma, la audiencia fue reprogramada para el 5 de julio.

El ahora señalado fue demandado por Rodrigo Octavio de la Peña Hurtado, Alonso Román Cuevas Ocampo y Armando Peón Mier y Terán en su carácter de apoderados legales de “Automotriz Toy del Sureste”.

Los hechos se dieron el 13 de diciembre de 2013, cuando se celebró un contrato entre “Automotriz Toy del Sureste” y “CAYSA Constructora”, seguidamente se pidieron pagos y cobros en concepto de obra que nunca se ejecutó.