MÉRIDA.- Aunque Natanael Ocaña López, se opuso a una suspensión condicional de proceso a favor de su agresor Roberto Caamal Collí (a) “Ojos”, porque quiere pagarle a plazos, la juez de control Elsy del Carmen Villanueva Segura liberó al agresor.

Ocaña López no tuvo de otra que ver cómo su agresor y el de su abuelo, Lucio Vicente Serrano Núñez, salía libre del penal.

“Ojos” debe residir en su domicilio; no acercarse a la casa de las víctimas; abstenerse de consumir drogas y bebidas embriagantes; conseguir un empleo dentro de un mes; someterse a vigilancia del Centro Estatal de Supervisión de Medidas de Cautelares; no poseer ni portar armas, y colocación de un localizador electrónico, todo por siete meses.

Para reparar el daño entregará 12 mil pesos. Diez mil pesos para Ocaña Pérez y 2 mil para Lucio Serrano.

De ese dinero, sólo cinco mil pesos fueron depositados y los restantes 7 mil serán pagaderos mil por mes. Por eso a Natanael no le pareció buena idea, pero a la juez aprobó el medio alterno.

Eran poco antes de las 11 de la noche del 3 de diciembre pasado, en la calle 90 con 169-B y 171 de la colonia Emiliano Zapata Sur III, llegó una niña llorando a su casa y le dijo a Natanael que un sujeto apodado “Ojos” le había faltado al respeto.

Molesto, salió en busca del tal “Ojos”, que vive enfrente, para reclamarle, sólo que en vez de eso, la familia de Caamal Collí se le fue encima, cayéndole a golpes entre todos.

Al ver esto, su abuelo fue al rescate de su nieto, pero para eso, el “Ojos” ya andaba armado con un machete y que le da al viejito con el arma, en todas partes del cuerpo.

No conforme, macheteó al joven en la pierna izquierda y como pudieron, los lesionados entraron a su casa, la cual fue lapidada por los familiares del “Ojos”, que al ver llegar a la policía mejor se fueron.

Ahora, esta hazaña se pretende saldar con abonos, cuando los agredidos tuvieron que sufragar una serie de gastos, sin que les dieran “fiado”.