Un intenso sismo de magnitud 6,3 ha sacudido este lunes la parte central de Papúa Nueva Guinea. 

El epicentro del terremoto se ha registrado a 56 kilómetros al Suroeste de la ciudad de Mendi, a una profundidad de 5,2 kilómetros, informa el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS).

Existe la amenaza de tsunami tras el movimiento telúrico de hoy.

No está claro si este sismo ha dejado daños a edificios o personas lesionadas.

La división en el país de ExxonMobil indicó que había cerrado su planta Hides de procesamiento de gas, que sufrió daños en edificios de administración, sala común y alojamientos de empleados.

La compañía dijo haber suspendido también los vuelos desde el aeródromo de Komo, construido para dar servicio a sus operaciones, y tenía previsto evacuar al personal no esencial de la planta.

El director de gestión de Oil Search, Peter Botten, dijo que la empresa cerraría algunas operaciones de producción en la zona como precaución.

Las dos empresas dijeron no tener noticia de heridos entre su personal, y ExxonMobil dijo tener localizados y a salvo a sus empleados.

Un empleado de la mina de oro de Porgera escribió en Facebook que tenía previsto averiguar qué había provocado apagones y otros daños tras el sismo.

En Indonesia, la agencia de emergencias señaló que el temblor causó escenas de pánico y dañó edificios en la zona de Boven Diguel, en la provincia de Papúa, que hace frontera con Papúa Nueva Guinea.

La información aún era limitada debido a lo remoto de la zona y a que no había personal de gestión de desastres en el lugar, señaló la agencia, indicando que aún no sabía si había víctimas mortales.