MÉRIDA.- Wilberth Arturo Arceo Ventura y Shadir Ariel Montañez Perera fueron imputados por los delitos de robo con violencia y lesiones, ya que durante su captura lesionaron a un agente de la Policía Estatal.

Primero, el juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero decretó como ilegal la detención de los imputados al existir una contradicción entre el tipo de flagrancia, pues no fue inmediata, sino por señalamiento.

Los sujetos hasta declararon que ya habían faltado mucho al trabajo y que necesitaban irse, además que tenían lesiones. El juez resolvió que por sus manifestaciones lo más idóneo sería fijar nueva fecha y hora para imputarlos, cosa que al fin sucedió.

Ahora, la juez de control Blanca Beatriz Bonilla González decretó en contra de este par de tipos las medidas cautelares de presentación periódica dentro de los primeros cinco días de cada mes; no salir del Estado; no acercarse a la víctima en 200 metros, y la colocación de un localizador electrónico, durante seis meses.

La juez fijó para el miércoles 21 de febrero la vinculación a proceso. Estos sujetos fueron denunciados Erick Fernando Kantún Rodríguez y el agente Wilberth Antonio Yah May.

Los atracadores fueron denunciados por los delitos de robo con violencia y lesiones contra servidor público, por el asaltado Erick Fernando Kantún Rodríguez y el policía Wilberth Antonio Yah May.

El domingo 4 de febrero, a las 23 horas, los ahora imputados se encontraban en la calle 50 entre 41 y 43 del Fraccionamiento Pacabtún, a la altura del parque “Pez Volador”, por donde caminaba Erick Fernando, al cual se le acercaron.

Uno lo tomó del cuello, lo tiró al piso, se sentó encima de él y comenzó a asfixiarlo, mientras el otro lo pateaba y le revisaba los bolsillos; lo despojó de dos teléfonos celulares.

Finalmente, lo remataron con un golpe en el rostro y emprendieron la fuga. Sin embargo, el afectado dio parte a la policía y agentes los localizaron.

En eso llegó como apoyo el agente Yah May, el cual le indicó a Wilberth Arceo que abordara a la patrulla; sin embargo, éste se negó y comenzó a lanzarle golpes, de modo que lesionó al policía en el dedo meñique de la mano derecha.

Los demás oficiales se encargaron de separar por la fuerza al imputado y controlarlo, cosa que no le gustó al juez.