MÉRIDA.- Los abogados de los sicarios tabasqueños Jonathan Mézquita Avalos y Oscar Miguel López Tovilla nombraron a un perito privado en criminalística para someter a pruebas las huellas dactilares encontradas en el arma con el que se ultimó a la señora Emma Gabriela Molina Canto.

Esta audiencia no duró mucho tiempo y prácticamente se hizo en privado y el juez Luis Edwin Mugarte Guerrero tuvo que aceptar el nombramiento del perito José Isaac Barquet Gómez.

Con esto, se busca establecer que las huellas encontradas en el arma (cuchillo) con el que se privó de la vida a la señora Molina Canto no corresponde a las de estos sujetos.

Es que, al parecer, en el control de la cadena de custodia para resguardar el cuchillo, se sobrepuso las huellas de los agentes aprehensores de los inculpados.

Los tabasqueños, además de las pruebas de psicología, tendrían este punto a favor, que, si bien, no es del todo suficiente para demostrar su inocencia, abre la posibilidad que la pena que se les imponga baje.

Días atrás, este juez accedió a diferir durante 10 días hábiles la audiencia intermedia para que sean juzgados estos sujetos, en virtud a un descubrimiento probatorio que fortalecería la teoría del caso en su beneficio.

Igualmente se efectuará una pericial de mecánica de lesiones en la víctima (esta prueba ya está adelantada).

El lunes 11 de diciembre, a las 10 de la mañana, se efectuará la audiencia intermedia, en la que las partes presentarán todos sus medios de prueba y testimoniales, para de ahí buscar un juicio abreviado o un juicio oral.