DZIDZANTÚN.- El viernes pasado, poco antes de las 9:00 de la noche, se inauguró formalmente “La calle de los murales”, ubicada en la calle 6, entre 21 y 23, y reunió aproximadamente a unas 1,200 personas entre jóvenes pintores, artesanos, escritores bohemios, cantautores y bailarines.

Alejandro Rosales Coral, creador de “La calle de los murales”, dijo estar feliz de ver su proyecto culminado y añadió que el propósito del proyecto es rescatar las artes y la cultura de Dzidzantún y darlo a conocer a nivel estatal.

Rosales señaló que está agradecido con el apoyo brindado de los 23 artistas dzidzantunenses y uno de Mérida,el director de la secundaria Herlinda Cetina Gómez y autoridades de la comuna.

Desde principios de este mes hemos trabajado muy duro para terminar los 200 metros cuadrados de murales con la temática de la historia fragmentada de la cultura y las artes desde el siglo XX hasta el XXI.

A lo largo de la calle de los murales, se observó algunas pinturas en homenaje a artistas de la comunidad como Pepe Domínguez y el Trío los Costeros.

Se expusieron cuentos inéditos de Abraham Simón Faisal y el libro de Reina Marentes “Haber nacido en la tierra del Mayab”.

Un visitante de otro municipio, que estaba en el lugar, dijo que estaba fascinado al ver tanto talento reunido y que era muy bonito escuchar la trova yucateca del cantautor dzidzantunense Juan Diego Estrada Herrera y su grupo Estrofa Acústica, integrado por los músicos Eric Escalante Navarrete, Daniel Espadas Pereira y Gasmelbar García Cohuo.

Se contó con la participación de un grupo de Rock de la UADY, y la presencia de Karen Rosales Coral, estudiante de música del Conservatorio, quien amenizó la noche con temas de la cantante Gloria Estefan.

El grupo de bailarines del colegio de bachilleres (COBAY) °Runers°, y ganador del torneo estatal de baile, inter Cobay, presentó un espectáculo para las aproximadas 300 personas que se reunieron a orillas del escenario para admirar el espectáculo.

Para darle más realce al evento los artesanos del lugar expusieron sus obras de arte y sus platillos gastronómicos al público que los visitó.

Alejandro Rosales añadió para terminar, “Es una responsabilidad de los dzidzantunenses procurar la conservación de este legado artístico-cultural”.