MÉRIDA.- Elda Carmela Rosado Sánchez, procesada por apropiarse de una casa en el fraccionamiento Francisco de Montejo, se ostentó como empleada del Congreso del Estado para tratar de revertir la acusación en su contra.

Sin embargo, la jugada no le funciona, toda vez que se mantuvo firme la acusación y se ratificaron las medidas cautelares en su contra.

Fue vinculada a proceso por el delito de despojo de cosa inmueble, pero seguirá en libertad condicional.

En la diligencia insistió en es trabajadora de la biblioteca del Congreso del Estado, pero el juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda consideró irrelevante el dato y no varió las medidas cautelares en contra de la mujer, consistentes en no salir del Estado e ir a firmar durante los próximos dos meses, lapso en el cual se cerrará la investigación.

Fue denunciada por Patricia del Carmen Gutiérrez Flota.

Como informamos, los hechos ocurrieron el seis de enero de 2015, cuando Elda Carmela acudió con el cerrajero Marco Antonio Alvarez Concha y se presentó como dueña de un predio en la calle 49-A entre 58 y 60 del citado fraccionamiento, el cual ya había verificado que estaba deshabitado momentáneamente.

Solicito el cambio de cerradura y al día siguiente, con la nueva llave entró al predio sin derecho ni consentimiento de la querellante.

La mujer contrato a un jardinero para dejar bonito el frente y no solo se metió a la mala, sino que se apropió de varios muebles y artículos de la dueña de la vivienda.