LAS COLORADAS, Río Lagartos.— El descontento de pescadores de Río Lagartos y San Felipe por la presencia de ribereños de otros estados, ante el inicio de la temporada de captura de pulpo, se repitió ayer en este puerto.

Cerca de las 7 de la mañana los pescadores locales se manifestaron en la planta del permisionario Pedro Tertuliano Pereira Moo, a quien pidieron que saque del puerto a los ribereños foráneos que trajo a trabajar.

La gente amenazó incluso con ir a buscar a los líderes pesqueros de Río Lagartos y San Felipe para que saquen de la comunidad a sus trabajadores, y dieron de plazo hasta el mediodía de hoy.

Ayer, cerca de la 1 de la tarde, los ribereños se reunieron en la plaza del puerto y acordaron dar un plazo de 24 horas a Tertuliano Pereira para que saque a la gente, o de lo contrario, advirtieron, lo harían a la fuerza.

Añadieron que hoy viernes sería bloqueado el camino de acceso para evitar que ingrese el comprador de pulpo del permisionario.

En medio de la reunión, madres de familia manifestaron que ya están cansadas de que gente extraña se quede a vivir del puerto “rompiendo la tranquilidad”.

“Ya no se puede salir por las noches con tranquilidad como antes porque esas personas (los fuereños) nos acosan y se siente un ambiente de inseguridad”, dijeron.

Los inconformes avisaron que hoy a las 7:30 de la mañana reventarán voladores para reunir a los pobladores y enseguida irán a la planta pesquera de Pereira Moo, para obligar salir a los foráneos, “que no vienen a sacar sólo el pulpo, sino incluso otras especies no permitidas”.

Los líderes de las cooperativas señalaron que lo peor de la situación es que casi ya no hay pulpo en la zona, pues toda la gente fuereña que llegó desde la “pepineada” depredó el molusco.

Los manifestantes pidieron a los pescadores que nadie salga a la “pulpeada” hoy viernes hasta nuevo aviso, y adelantaron que es probable que la actividad se restablezca hasta el próximo lunes, cuando se logre sacar a todos los foráneos.

Mientras tanto, en Río Lagartos y San Felipe continuaron ayer las reuniones y las inspecciones a cada permisionario para verificar que el número de embarcaciones que mandarán a la pesca concuerde con la cantidad de sus permisos. (Diario de Yucatán)