SAN CRISANTO, Sinanché.- Buzos que se dedican a la pesca del mero y de langosta capturaron ayer jueves en la mañana, frente a las playas de San Crisanto, un Pez León, considerado una especie sumamente venenosa y un depredador de arrecifes.

Poco antes de las 10:00 de la mañana, ayer jueves el buzo Porfirio Kantún, quien se encontraba pescaba peces de escama a cuatro brazas de profundidad observó que cerca de una roca estaba un “Pez León”.

Porfirio Kantún decidió capturar al pez para dar a conocer que en las aguas yucatecas existe este pez.

Según portales y noticias, la especie no es nativa del océano Atlántico y es considerado un pez venenoso, rápido para reproducirse y agresivo al buscar comida, comer cualquier cosa, y se atiborran tanto que desarrollan una enfermedad en el hígado. Sin predadores que los detengan —excepto el humano —

El ecologista, James Morris, junto con el National Centers for Coastal Ocean Science (NCCOS) señalaron que aunque no sea la peor epidemia que el Atlántico haya tenido que enfrentar, sí tiene todos los elementos para convertirse en un desastre. El ambientalista dijo que el pez león ha traido un “gran cambio en la biodiversidad” y es a lo que él llama “el más abundante e invencible depredador en un arrecife de coral (en el Atlántico)”.

El animal fue visto por primera vez hace una década y su población ha crecido rápidamente. La especie produce de 30,000 a 40,000 huevos en pocos días y maduran sexualmente a partir de un año. Actualmente se pueden encontrar en el Amazonas, las Bahamas, el Caribe y las aguas a lo largo de Carolina del Norte.

Al no ser una especie nativa, el pez león es especialmente peligroso para el ecosistema, porque los peces originarios del Atlántico no tienen ese instinto natural para mantenerse alejados de ese depredador.