CIUDAD DE MÉXICO.- Comprender la psicología de nosotros mismos y de los demás a nuestro alrededor, puede desempeñar un papel importante en nuestra felicidad.

Todos sufrimos de creencias limitantes obtenidas de experiencias pasadas e interacciones con otros que inhiben la facilidad con la que vivimos nuestras vidas.

Ya sea creyendo que no somos lo suficientemente buenos porque nos dicen que debemos estar en cierto punto en nuestras vidas para lograr éxito, provocando sentimientos de fracaso, o simplemente malentendidos.

La intención de todo esto es lograr enderezar nuestras percepciones y limitar la cantidad de negatividad alrededor de nosotros mismos. Hacer un hábito de estas reglas psicológicas es crucial para tener una vida más fácil:

1. La gente no se preocupa tanto como piensas

Puede sonar áspero, pero esencialmente es verdad. Estar tan atrapados en lo que otros piensan de nosotros o intentar cubrir las expectativas de otras personas, es perjudicial para nosotros porque todo el mundo está envuelto en sus propios problemas e inseguridades.

Es mucho mejor tratar de tener esto en mente, ya que la mayoría de lo que creemos que la gente está pensando son sólo suposiciones que nuestras propias mentes crean basadas en experiencias pasadas o percepciones e interpretaciones incorrectas. Si quieres ser feliz, deja que los demás piensen lo que quieran y no te afecte.

2. Constantemente cambiamos lo que somos

Es fácil pensar que somos la misma persona que hace diez años y estaremos pensando y sintiendo lo mismo en otros diez años, pero no lo somos. Nuestro yo pasado, presente y futuro son todos esencialmente independientes porque nuestra mentalidad cambia con las circunstancias y experiencias de nuestras vidas.

Debido a esto, debemos ser siempre fieles a nuestro ser actual al tomar decisiones. Nunca podemos predecir lo que nuestro futuro yo pensará y sentirá. El poder está en el ahora.

3. Deja de compararte con los demás

Con los medios de comunicación social presionando a publicar los mejores momentos, puede ser fácil comenzar a compararnos con las vidas aparentemente “perfectas” de otros.

La verdad es que todos somos vulnerables. Todos queremos ser aceptados por los demás. Es una enorme pérdida de tiempo creer que la gente es de alguna manera mejor que nosotros y tienen su vida resuelta. Compararse es inútil porque todos tenemos preocupaciones, inseguridades e incertidumbres.

SDP NOTICIAS.-