CIUDAD DE MÉXICO.- El dolor de espalda es una de las peores molestias pues puede escalar hasta impedir la movilidad. Es posible evitar los problemas de la columna, pues en la mayoría de los casos el dolor es provocado por malos hábitos.

Los primeros malos hábitos que hay que erradicar, por salud en general, es la mala alimentación y la vida sedentaria. Los alimentos chatarra así como una vida sin ejercicio llevan al sobrepeso y obesidad, que además de causar enfermedades crónico-degenerativas como diabetes e hipertensión, hacen daño al sistema óseo, principalmente rodillas, espalda y articulaciones.

Pero comer mal no es el único hábito que debes evitar; hay otras actividades que se realizan todos los días y que merman lentamente la salud de tu columna vertebral.

1. Usar tacones

Los zapatos altos no sólo son incómodos para el pie. Aunque son amados por el estilismo que dan al cuerpo femenino, son prendas no recomendadas por los quiroprácticos y médicos en general. Las zapatillas desgastan el pie y tensan la espalda.

“El uso de tacones no solo altera la biomecánica de la marcha, también influye en la deformación anatómica del pie lo que repercute en enfermedades como lumbalgia, hallux valgus, fascitis plantar, caída del arco transverso y también se ha asociado a gonalgia y otras alteraciones de la rodillas”, indica la doctora Grecia Xochipa Cervantes, especialista en acupuntura humana, en entrevista para Economía Hoy.

La recomendación de ortopedistas es recurrir a zapato de piso que tenga un tacón ligero, no más de cuatro centímetros. Se sugiere evitar el uso prolongado de tenis, sobre todo aquellos pares que no lleven plantilla.

2. El uso continuo de celular

La mala postura y tiempos prolongados de dispositivos móviles causan daños en la parte superior de la espalda. ¿Alguna vez te has sentido muy cansado por usar tu smartphone? La respuesta está en la posición que toma tu espalda al revisar el celular, considera cuántas veces realizas este movimiento en un día y eso te dará una explicación del malestar.

3. El uso de la computadora

Lo mismo sucede con la postura adoptada frente al monitor. La cosa empeora cuando la computadora es portátil. El cuello y la espalda en general adoptan malos hábitos de postura que con el tiempo derivan en dolor, problemas crónicos y degenerativos.

La recomendación es colocar el monitor a la altura de los ojos, evitar mover el cuello para cubrir el campo visual de este.

4. Sentarse mal en casa y oficina

La forma en que tomamos asiento en cualquier lugar deben ser cuidando la higiene de la columna. Médicos recomiendan pasar mucho tiempo sentados.

?Espalda recta sobre el respaldo, mirada al frente, hombros hacia atrás y relajados, manos a la altura de los codos y piernas formando un ángulo de 90 grados, con las rodillas ligeramente más bajas que las caderas y plantas de los pies apoyadas en el suelo? son las características de la postura correcta que se sugieren en el blog de la Clínica Quiropráctica de Raúl Ortega, en Madrid.

5. Cargar mucho, mal y con brusquedad

Sabías que la manera correcta de cargar un objeto que está en el piso no es agachándose con las piernas rectas. Al cargar debes mantener la espalda recta, pues al curvarla la exponemos a una contractura o incluso a un desplazamiento de disco.

Para hacerlo bien se deben doblar las piernas y, manteniendo la espalda recta, levantar el objeto dejando el esfuerzo físico en las piernas, como si se estuviera realizando una sentadilla.

En este punto es importante destacar el incorrecto uso de bolsos de gran capacidad. Estas prendas de moda son asesinas de la salud. Al llevar un bolso de mano muy pesa

do se lleva el peso a un sólo lado del cuerpo, rompiendo el equilibrio central de la columna vertebral.

6. Uso incorrecto de equipo de gimnasio

Nadie te dice que no vayas al gimnasio o que no levantes o jales peso; el ejercicio es bueno siempre y cuando esté supervisado por un especialista de deporte o acondicionamiento físico. Las malas posturas de la silla de oficina pueden llegar al aparato para ejercitar espalda, hombro o pierna y en vez de lograr acondicionamiento se puede ocasionar alguna lesión.

7. Levantarse mal de la cama

Desde Fisioterapia Online nos recomiendan enderezar el cuerpo sin hacer el típico abdominal. De hecho, recomiendan no hacer ningún abdominal pues con el tiempo se daña la columna. El sitio sugiere recostarse en un costado, bajar los pies y encontrar apoyo en los brazos para dejar el colchón o el suelo. Aseguran que con el paso de los años todos terminaremos apoyándonos en brazos, pues será más cómodo para ponernos de pie.

¿Cómo cuidar la higiene de la columna?

Para todo trabajo, movimiento o posición que realizamos de manera cotidiana existe una manera adecuada y correcta que evita lesiones a largo plazo o molestias corporales.

La finalidad de cuidar la higiene postural es reducir y prevenir los daños vertebrales “en la serie de actividades que realizamos de manera cotidiana pero con el cuidado suficiente las posiciones adecuadas y el ritmo correcto. Así el verbo barrer se transforma en un arte”, dice la doctora Grecia Xochipa, parte del equipo de la Unidad Médica de Acupuntura y Rehabilitación.

“El cuidado de tu cuerpo comienza por un eje central (la columna vertebral) si hay un desajuste en este eje el resto de las articulaciones se afectan generando lesiones al inicio reversibles, pero con el paso del tiempo se tornan crónicas y degenerativas”, agregó

¿Tengo problemas con mi espalda?

No es necesario esperar a sentir dolor o quedar incapacitado por el problema para darse cuenta. Algunos síntomas avisan que es momento de visitar a un especialista para revisión y mejora de la higiene postural.

“Un síntoma característico es una ligera sensación de pesadez en la espalda y la sensación de cansancio repetido por más de cuatro días a la semana”, indica la especialista en acupuntura.

La espalda provee soporte a la cabeza y da flexibilidad y movimiento al cuerpo en todas las direcciones. Cuidar de ella es atender también la salud de nervios, músculos, huesos, ligamentos y tendones interconectados; la falla o daño de cualquiera de estos puede ser fuente de dolor y limitante de movimiento.

ECONOMÍAHOY.-