MÉRIDA.- Cuando dijo que su chofer era testigo de lo que había declarado Roger Moo, en relación con el daño con ácido a calles recién hechas por la Comuna, Jesús Pérez Ballote nunca, ni en su peor pesadilla, imaginó que su empleado declararía contra él y dijera que es el autor del ataque a las arterias y que amenazó a Roger Moo.

Pues sí, contra lo que hubiera pensado el presidente del Comité Directivo Municipal del PAN meridano, y en lo que representa un giro de 180 grados en su actuar, Christopher Guillermo Rubio Herrera, chofer de Pérez Ballote, afirmó en entrevista que el líder panista orquestó el ataque a las calles recién hechas.

Además, Rubio Herrera dijo que hace responsable a Pérez Ballote de lo que pueda pasarle a él y a su familia y dijo renunciará al PAN.

Christopher declaró hoy jueves en la mañana, en la Fiscalía General y ante medios de comunicación, para sorpresa de casi todos, en contra de su jefe Pérez Ballote y dijo que el líder panista orquestó el ataque a calles nuevas y además amenazó a Roger Moo para que diga que un funcionario del gobierno estatal estaba involucrado.

Rubio Herrera declaró a diversos medios de comunicación y en la FGE que Pérez Ballote se citó con un individuo en el parque de Pacabtún y ya a bordo del vehículo que él manejaba (Rubio Herrera), se obligó a la persona identificada como Roger Moo a que leyera un texto para después grabarlo.

La Fiscalía llamó a comparecer al implicado, debido a que Pérez Ballote lo señaló como uno de los testigos de que Roger Moo denunció a la empresa en la que se preparó el ácido para dañar las calles y que también involucró a un funcionario del gobierno estatal.

Temeroso de que puedan involucrarlo en el daño a las calles, Rubio Herrera declaró que él no atentó contra la integridad de Roger Moo, ya que sólo seguía las indicaciones que le daba su jefe. Precisó que el temor se debe a que Pérez Ballote recibía instrucciones directas de gente del Ayuntamiento de Mérida.