CIUDAD DE MÉXICO.- Todo está bajo control, “en la Central de Abasto ya no hay venta de gasolina robada”, presumió el pasado miércoles el edil de Huixcolotla, Filomeno Cruz, pero cinco días después echaron por tierra sus afirmaciones.
En un reportaje dado a conocer por Página Negra se exhibió la venta indiscriminada de combustible pese a la presencia de elementos del Ejército y de la Policía Estatal; aún más, en la comercialización se emplea a niños.
Piden quitar bienes a los huachicoleros
En las inmediaciones de la Central de Abastos se puede observar a varios menores de edad con una manguera en mano, quienes apenas observan un vehículo gritan: “¡Lleve su gas!”.
Ofertan en 240 pesos la garrafa “lo menos”, advierten. Si se llega al acuerdo, ahí mismo, “la echamos al tanque”.
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Así se puede conseguir una carga de combustible, que se expende entre 12 y 12.50 pesos el litro
No es nuevo el que los niños sean parte del ilícito, ya en el año 2016, este diario evidenció de su reclutamiento en los municipios de Palmar de Bravo, San Matías Tlalancaleca y Tepeaca.
Los menores son adiestrados para trabajar como choferes, halcones y hasta para colocar mangueras al momento de la extracción de la gasolina, pues son más ágiles que los adultos.”, se lee en la información.
EXCELSIOR.-