MÉRIDA.- El depravado Ángel Jesús Flores Pech fue imputado a proceso penal, por el delito de abuso sexual equiparado (3) porque presuntamente obligó a su cuñado de seis años de edad a hacerle el sexo oral y, no conforme, también le hacía lo mismo al niño.

El juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda lo imputó y decretó, como medida cautelar, que deposite una garantía económica de 15 mil pesos; no salga del Estado; firme al Centro Estatal de Medidas Cautelares, y no se acerque a la víctima. Estas medidas durarán hasta la audiencia de vinculación, que tendrá lugar el miércoles 17 de mayo.

Se pidió la presión preventiva, pero no se accedió a la misma debido a que el imputado ha comparecido de manera voluntaria y ha comparecido en varias ocasiones ante el Ministerio Público.

Incluso tiene arraigo domiciliario en Mérida, y por la simple pena no puede considerarse para la imposición de la medida cautelar.

Según datos recabados, en al menos tres ocasiones, Flores Pech, cuando estaba en el interior de un predio del fraccionamiento Villas del Sol y en otro de Paseos de la Fuente, al hallarse a solas con el menor, por la confianza que se le tenía, obligó al niño a que le haga el sexo oral.

El tipo hasta presuntamente eyaculaba en la boca del niño y, no conforme, él también le hacía el sexo oral al infante.

La primera vez que sucedió el ataque fue en noviembre del 2012; otra ocasión fue en diciembre del 2012, y después de esa fecha muchos sábados más hasta que la última vez que sucedió fue el 1 de enero del 2015.

El sujeto se aprovechaba que la víctima no tenía la capacidad para comprender la naturaleza del hecho, ya que cuando empezó a abusarlo, el menor tenía seis años de edad. Los abusos terminaron cuando el menor tenía nueve años.