MÉRIDA.- Alexis Geovanny Montalvo Haas (a) “El Sucio”, fue absuelto por el Tribunal Primero de Juicio Oral, al conocerse que estaba implicado en el homicidio del sacristán de Ucú, Wilberth Pinto Novelo, sólo por un testigo de oídas.

Sin embargo, su coacusado Kenneth Alexander Peraza Pech fue encontrado culpable del delito de homicidio calificado y el tercer implicado y beneficiado con un “criterio de oportunidad”, por haber dicho quiénes más estaban metidos en el problema, Wilmart Mijahil García Dzul (a) “Chelo”, fue condenado por robo calificado cometido con violencia.

Al último, a “Chelo”  las cosas no le salieron bien, porque se demostró que tomó parte en el robo en la casa del ahora occiso.

Para el lunes se sabrá las penas carcelarias y económicas a las que se habrán de enfrentar los ahora condenados y más tarde se programará la audiencia de lectura de sentencia.

Los jueces integrantes del tribunal desecharon la testimonial de Reyes de Jesús Canché Azcorra en contra de “El Sucio”.

Igualmente la esposa del sacristán, la señora Ada Lucía Salazar Ek, en las audiencias aceptó que no vio a los imputados y que sólo escuchó sus voces, porque estaba oscuro cuando ocurrieron los hechos.

Los hechos se registraron el 16 de mayo del 2016, cuando estos sujetos entraron a la casa de la pareja de ancianos y se encontraron primero con la señora Ada Lucía, a quien amordazaron y ataron de pies y manos en una recámara.

Luego se dirigieron a la otra habitación, en donde atacaron a Wílberth Pinto para someterlo y torturarlo para obligarlo a decir el lugar en el que estaba el dinero, pues esta persona se dedicaba al agio. Se dieron a la fuga llevándose 74 mil pesos.