MÉRIDA.- La lucha por la gubernatura de Yucatán comienza a calentarse. Una cuarta encuesta  hecha en marzo sobre las preferencias del voto rumbo a 2018 confirma las tendencias: Mauricio Vila Dosal, del PAN, y Jorge Carlos Ramírez Marín, del PRI, siguen siendo los mejor posicionados para contender por la silla del Palacio de la 61.

Los anteriores sondeos hechos en octubre y diciembre de 2016 y el actual de marzo de este año muestran que Ramírez Marín y Vila Dosal van en caballo de hacienda rumbo a 2018. Nadie los ha desbancado como punteros y ambos mantienen distancia sobre otros “suspirantes” dentro del PRI y del PAN.

Si bien, el más reciente sondeo coloca a Vila Dosal por menos de un punto de diferencia sobre Ramírez Marín, 36.41 contra 35.48 por ciento (una diferencia de apenas .93), la situación da la vuelta cuando se pregunta por partidos, ya que el PRI aparece arriba con 31.72 contra 29.93 por ciento del PAN, lo que arroja 1.79 puntos de diferencia.

Eso significa que si hoy fueran las elecciones, el PRI ganaría la gubernatura de Yucatán.

Los entendidos dirían que, en todo caso, por lo cerrado de las cifras, hay un empate técnico y nadie puede echar las campanas al vuelo.

Desde la primera encuesta realizada en agosto de 2016, Ramírez Marín y Vila Dosal se han mostrado como punteros. Los dos se mantienen a la cabeza en el PRI y el PAN.

El estudio, de acuerdo con nuestras fuentes, se promedia de varias encuestas y se cruzan las cifras para tener datos más reales.

Según las encuestas, presuntamente encargadas por la Segob, cuando a Ramírez Marín le ponen a otros panistas distintos a Vila, los supera en las preferencias. Lo mismo pasa con Vila cuando le ponen a otros priistas.

Así que los gladiadores serían ellos, aunque falta ver qué pasará, pues a Vila también se le ve como un alcalde que podría repetir.

En el caso de Ramírez Marín ya se comenta que, si el PRI gana las elecciones en el Estado de México en junio próximo, aseguraría la candidatura en 2018, pues tendría ese mérito como delegado especial de su partido en Edomex, una encomienda que le dieron desde Los Pinos.