PETO.- Un bebé que nació prematuramente falleció el pasado lunes, luego de que la madre de 17 años dio a luz a las dos de la tarde de ese día, en su vivienda ubicada en la calle 32, a la salida de Tahdziú; la joven madre sólo recibió ayuda de su marido, quien la recostó en una hamaca junto al recién nacido, ya que tenía el cordón umbilical colgado; la menor mandó a llamar a su suegra, quien es partera, pero esta llegó una hora después y notó que el bebé ya no tenía signos vitales.

Se determinó que la causa del deceso fue por nacimiento prematuro y no hubo delito que perseguir.

Sin embargo, durante las diligencias se confirmó que la joven nunca fue a consultas médicas ni llevaba un control de embarazo, lo cual llama la atención de autoridades de salud porque en el hospital de la villa se cuenta con los medios de atención a embarazadas.

Todo se inició cuando la mujer se comenzó a sentir mal y tuvo unos fuertes dolores en el vientre, pero no acudió en busca de atención médica sino que se quedó en su domicilio.

Los dolores aumentaron y luego de un rato, alrededor de las dos de la tarde de ese día, le dieron ganas de ir al baño y fue cuando nació su bebé de manera prematura.

La menor, F.C.D., de 17 años de edad, pidió auxilio a su esposo y fue recostada en la hamaca. Debido a que él bebe tenía el cordón umbilical colgado, lo dejaron a su lado y mandaron a hablar a la mamá del esposo, la cual es par-tera, para que la atienda.

Eso ocurrió alrededor de las dos de la tarde, y una hora después llegó la suegra de la menor, quien se percató de que el bebé estaba muerto, pues no tenía signos vitales, y no había nada que hacer.

La familia realizó todos los preparativos para el velorio, pero hubo problemas cuando intentaron enterrar al bebé, ya que uno de los requisitos para que les den el acta de defunción es comprobar la causa de la muerte y no contaban con el certificado médico requerido.

La familia tuvo que recurrir a médicos particulares, pero nadie se arriesgaba a darles el certificado médico debido a que no sabían cómo ocurrieron las cosas. Finalmente, tuvieron que ir la Comandancia, donde explicaron lo ocurrido y oficiales dieron parte a la Fiscalía.

Anteayer por la tarde llegó personal del Ministerio Publico, peritos, incluso del Servicio Médico Forense, quienes acudieron al predio de la familia y luego de las diligencias correspondientes determinaron que la muerte del bebé fue por nacimiento prematuro.

DIARIO DE YUCATÁN