MÉRIDA.- Puntual, igual que la poética del haikú que se basa en el asombro y la emoción, el escritor Agustín Monsreal llegó a Mérida para continuar los festejos de sus 75 años de vida que celebró en Palacio de Bellas Artes con la publicación de sus libros “Los pigmeos vuelven a casa” y “Mamá duerme sola esta noche”.

Sin embargo, el tallerista y poeta fue más benévolo en Mérida, “aquí, donde enterraron mi tuch”, porque en una sola noche presentó tres libros: “Esto que pasa en mi corazón”, “Deslealtades del destino” y “Mínimas minificciones mínimas”.

Luego, en el marco de la Noche Blanca dio a conocer “Mamá duerme sola esta noche” y el domingo 11 presentó otro en el Centro Cultural Olimpo.

Esa noche, la del jueves 8 de diciembre será inolvidable, no sólo porque Chaac (dios de la lluvia) obligó a la Feria Internacional de la Lectura Yucatán y la Universidad Autónoma a cambiar la sede del evento, ni porque estuvo acompañado de grandes mujeres, como la bailarina y coreógrafa Tatiana Zugazagoitia, quien con su cuerpo describía palabras; Cristina Leirana, Celia Pedrero, ni porque fueron tres libros, sino porque se desbordaron las emociones cuando intervino su hija Eurídice Sacramento.

Las anécdotas de la presentadora del tercer libro hizo reír, soñar, evocar y llorar al público que se trasladó del patio central de la UADY al Teatro Fantasio, a causa del torrencial aguacero.

Fue una noche bonita, sobre todo cuando la maestra Cristina Leirana leyó algunos poemas y haikús que se incluyen en el libro “Esto que pasa en mi corazón”.

En su turno -al presentar “Deslealtades del destino”-, Celia Pedrero no dejó dudas:  ama la obra del maestro Monsreal y demostró porqué su estilo lo ha convertido en uno de los escritores favoritos de México.

“ME RESPONDIERON LOS EDITORES”

Después de agradecer por la danza bella y poética de la maestra Tatiana Zugazagoitia, las palabras de las presentadoras y el apoyo de la FILEY y la UADY,  el maestro Agustín Monsreal se dio tiempo de firmar libros, tomarse fotos y charlar con algunos medios.

–Maestro, son tres libros en una noche, no es algo frecuente…

–Afortunadamente, los editores me respondieron bien, porque el propósito de que fueran siete libros y un disco de voz viva, es que cada libro signifiquen 10 años y el disco cinco y así celebrar mis primeros 75 años de vida.

–Son 75 años de edad y 45 de trayectoria, ¿está satisfecho con la vida o qué le falta?

–No sé si satisfecho sea la palabra adecuada, creo que estoy agradecido con la vida, con la familia que me ha dado, con mis amigos, con las personas queridas, con las que no me llevo. Estoy muy agradecido con la vida, porque me permite estar y nutrir el ámbito de la lectura –dijo y su rostro reflejaba precisamente felicidad y agradecimiento por la vida.