MÉRIDA.- El taxista del FUTV, Marcos Alberto Cruz Vázquez, fue beneficiado por medio de un procedimiento abreviado, al ser condenado por el delito de abuso sexual en agravio de una niña de nueve años, con una supuesta sanción de 3 años y 4 meses de cárcel.

La juez Blanca Beatriz Bonilla González también le impuso la sanción pecuniaria de 134 días-multa; el pago de la reparación del daño; una amonestación pública; la suspensión de su derechos políticos; la prohibición de acercarse a la víctima, a la denunciante, a sus familiares y domicilio de los mismos a menos de 200 metros.

Sin embargo, tiene derecho a seguir libre, pues su sanción no fue superior a los cuatro años de cárcel y si paga un dinero saldrá a la calle.

En la carpeta de investigación se menciona que el 8 de junio, a las 9 de la noche, aprovechando que los padres de la menor no se encontraban, ya que es amigo de ellos y sabe sus horarios, acudió al predio de la denunciante -de identidad reservada y cuyos datos de predio también se mantienen en reserva-, a bordo de un taxi con placas 6570-YSB.

Conocedor de dónde se encontraban las llaves, metió su mano por la ventana donde no tiene cristal y agarró el llavero.

Abrió la puerta de la casa y entró, donde se encontraba la menor y sus hermanitos de 2 y 4 años de edad en la sala.

Sin pensarlo, agarró a la niña de la mano y la condujo a un cuarto, donde en la cama empezó a acariciarla de forma lasciva por encima de la ropa en sus partes íntimas.

La menor gritó para que no la siguiera lastimando y sus hermanitos fueron a defenderla, pero no lo lograron.

Esto fue observado por una vecina, quien había acudido al predio por indicación de la denunciante, por lo que al verse descubierto salió del lugar y abordó su vehículo, pero fue detenido por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública.