ESTADOS UNIDOS.- Una joven pareja de Washignton, EU, fue acusada de varios cargos de abuso infantil luego de que se descubriera que mantenían a sus tres hijos en condiciones extremadamente insalubres y les inyectaban heroína, la cual llamaban “medicina para sentirse bien”, informó The Washington Post.

Ashlee Hutt y Mac Leroy McIver, de 24 y 25 añosrespectivamente, han sido acusados de entrega ilícita de una sustancia controlada a un menor, maltrato criminal en segundo grado y abuso de un niño en segundo grado, de acuerdo con el caso abierto en la Corte Superior del condado de Pierce.

“Los niños vivían en condiciones deplorables, en una casa llena de basura, ratas, y agujas que los padres usaban para drogarse”, relató al diario el detective Ed Troyer, del Departamento del Sheriff del condado. “Incluso quitando el factor de la heroína, no era una buena situación en la cual vivir”, señaló.

“Por desgracia, frecuentemente encontramos niños viviendo en condiciones terribles, aunque no solemos ver a padres administrando intencionalmente drogas a sus hijos”, apuntó Troyer.

Los tres niños de 2, 4 y 6 años fueron puestos bajo custodia. Los padres, que se han declarado no culpables, se encuentran detenidos y deberán pagar una fianza de 100 mil dólares cada uno.

Cuando la policía allanó la casa tras la denuncia de un vecino, hallaron “envoltorios de aluminio y heroína en el dormitorio principal junto a la cama”. Servicios infantiles reportó que “varios individuos vivían en la residencia y todos usaban heroína”.

Los trabajadores sociales descubrieron en el cuerpo de la niña de dos años varios moretones que parecían ser de constantes inyecciones. El niño de 6 años le dijo a los agentes que McIver los había ahorcado a él y a sus hermanosy que la pareja les dio “medicina para sentirse bien”, señala WP.

“El pequeño describió esta sustancia como un polvo blanco mezclado con agua. Sus padres usaban una aguja para inyectarles la ‘medicina para sentirse bien’ a él y a sus hermanas. Después de eso se quedaban dormidos”, señala el reporte de la investigación.

Dos meses después de que los niños fueron llevados en custodia, las autoridades realizaron pruebas toxicológicas a los infantes al analizar sus folículos capilares. Aunque el niño de 6 años ya no presentaba rastros de heroína, se encontraron algunos en la pequeña de cuatro años, y su hermana, de dos años, dio claramente positivo a la droga.

Ambos padres admitieron ser usuarios regulares de heroína, aunque McIver culpó a la niñera por inyectar a los niños.

Los niños alrededor de EU se han convertido en víctimas constantes, ya sea directa o indirectamente, de una ola de sobredosis que afecta al país norteamericano. Un estudio señala que la mayoría de los daños son psicológicos.

EL UNIVERSAL.-