MÉRIDA.- El mal padre Elías Alejandro Medina Lizarraga buscó llegar a un “acuerdo reparatorio” nada desventajoso para él y pagar, en abonos, todo el dinero que le debió proporcionar a su ex e hija y que dejó de hacer durante un buen tiempo.

Ante esto, el juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero dio el visto bueno a este acuerdo y suspendió provisionalmente el proceso penal que se instruye contra el mal padre.

Entre las condiciones establecidas estuvieron que el imputado pagara a la denunciante María Amparo Corbala Moguel 23 mil pesos, en concepto de reparación del daño, respecto a las cantidades no ministradas desde de diciembre de 2014 hasta octubre de 2016.

Es decir, hará 16 pagos, el primero por 8 mil, que será entregado a la denunciante en el momento de la ratificación y aprobación del acuerdo reparatorio y los siguientes pagos serán de a mil pesos, del 30 de noviembre de 2016 al 31 de enero de 2018.

Este sujeto igualmente estuvo dispuesto a ofrecer una disculpa pública a la denunciante.

Una vez cumplidas las obligaciones del presente acuerdo se extinguirá la responsabilidad civil y penal del imputado y se dará el sobreseimiento de la causa.

Medina Lizarraga y la denunciante mantuvieron una relación sentimental y procrearon una hija, siendo que en el año 2012 firmaron un convenio de guarda, custodia y alimentos en el Juzgado Segundo de lo Familiar del Primer Departamento Judicial del Estado.

Acordaron que el imputado depositaría mil pesos de manera mensual en concepto de pensión alimenticia a favor de su hija menor; sin embargo, desde junio del 2014 sin motivo justificado dejó de cumplir con depositar dicha cantidad.