MÉRIDA.- Los pocos elementos que permanecen en la Fiscalía General del Estado, después de ser absorbidos por la Policía Estatal de Investigación, se llevaron la sorpresa que les redujeron sustancialmente sus sueldos.

Es por eso que ahora buscan demandar al fiscal general Ariel Aldecua Kuk por esta anomalía que a todas luces es anticonstitucional “porque el salario es sagrado”.

Dichas rebajas, que afectan a más de 30 empleados que ahora son “técnicos, analistas, etc.”, fueron detectadas al firmar sus recibos de nómina de ayer, siendo que algunos resintieron descuentos de 400 pesos en su salario quincenal y otros, que percibían 4,400 pesos, ahora reciben 2,600 pesos.

A los 200 ministeriales que fueron absorbidos por el nuevo organismo policial les están respetando sus emolumentos, que son desembolsados por la Secretaría de Seguridad Pública.

Indicaron que los diputados, ahora encabezados por su ex jefa Celia Rivas Rodríguez, les habían informado que no habría ningún tipo de afectación en sus percepciones, pero ahora se dan cuenta que les dieron “atole con el dedo”.

Uno, que se iba a jubilar con sueldo de agente de 4,800 pesos quincenales, de buenas a primeras percibe 2,600.

A unos cuantos, les “disfrazaron” el descuento, porque, aunque siguen cobrando lo mismo, su sueldo base ha sido “bajado” y aunque parezca que se completa con compensaciones, al final se verá reflejado el descuento en el aguinaldo, la prima vacacional, los días de ajuste, etc., que se otorgan de acuerdo al salario base.