MÉRIDA.- Aunque ya en una reunión trabajadores de la Comuna dijeron todos los chanchullos que hace Eloína Martínez Puc, como jefa de Cobranza de la Tesorería, ni el alcalde Maurico Vila Dosal ni el tesorero Juan Carlos Rosel Flores la despiden, en lo que se puede entender como una complicidad y tratarán de darle un “carpetazo” al asunto.

2-16Este caso se sumaría al de Martha Herminia Gómez, coordinadora del Departamento de Patrimonio Municipal, del  Ayuntamiento meridano, quien al amparo de su cargo en la Comuna defraudó miles de pesos en Caucel, ya que ofrecía regularizar papeles de terrenos a cambio de dinero, pero no cumplió; sin embargo, el entonces jefe de Administración Juan Carlos Rosel se hizo de la vista gorda y dijo que esa mujer no defraudó como empleada sino como ciudadana, de modo que sigue en el puesto, puesto que Rosel Flores le dio “carpetazo” al caso.

18-17Respecto al caso del robo que cometió Eloína junto con subalternos suyos, hubo una reunión entre ellos y altos funcionarios de la Comuna en la que dijeron como roba y con quienes lo hace, con la complicidad del subdirector Santiago Massa.

Sin embargo, parece que a los jefes les entró por un oído todo y les salió por el otro, porque esa mujer sigue en su puesto feliz y campante y además se dio el lujo de correr al que la denunció, con la complacencia de Rosel Flores y del alcalde, indicó uno de los denunciantes.

Como publicó El Grillo, Miguel Borges, encargado del tianguis del automóvil fue el que le presentó a Eloína pruebas del robo, pero ésta las desechó porque ella estaba implicada y en venganza quitó a Miguel del puesto.

Además, dimos a conocer que en su paso por Liconsa, Eloína se robó 20 mil pesos, al menos sólo de esa cantidad se supo, la descubrieron y la Función Pública la obligó a devolverlos y la suspendió un tiempo de sus funciones.