MÉRIDA.- Hace 14 años, el 22 de septiembre de 2002, el huracán “Isidoro” afectó a Yucatán, y estuvo en tierra 35 horas, de modo que devastó al estado, aunque sus vientos sostenidos sólo eran de 177 kilómetros por hora y rachas de hasta 220 kph.

El meteoro entró por la costa de Telchac y al día siguiente se desplazó a la zona más poblada y de mayor infraestructura industrial y comercial del Estado, causando importantes daños que superaron por mucho los causados en 1988 por “Gilberto”, el llamado “huracán del siglo”.

Durante su trayectoria la zona de alerta por el meteoro se modificó en varias ocasiones y se cubrió  desde Cabo catoche, Quintana Roo, hasta Veracruz. Esto se debió a que el meteoro parecía que saldría del estado, pero luego cambiaba de rumbo y seguía en tierra.

Isidoro fue el primer huracán de la temporada 2002 que tocó tierras mexicanas desde el Huracán Pauline de 1997.

Este huracán se mantuvo 35 horas afectando la Península de Yucatán, tiempo en el que ocasionó graves inundaciones, la interrupción del suministro de energía eléctrica, la destrucción de viviendas y pérdidas en la producción agrícola y ganadera.

Los daños que ocasionó “Isidoro”, en gran medida, fueron causados por el tiempo que permaneció  el meteoro en tierra, pues estuvo 14 horas como huracán categoría 3, degradándose a tormenta tropical y permaneciendo 23 horas sobre la Península.