IZAMAL.- De ocho puñaladas murió el señor Amílcar Ávila Álvarez, de 65 años de edad y de quien se dice que era agiotista y gustaba de meter a jovencitos y jovencitas a su casa para beber; los sospechosos del asesinato son dos hermanas y un vándalo.

El homicidio se efectuó alrededor de la una de la mañana con 35 minutos de este sábado pasado, cuando el señor Ávila Álvarez se encontraba en su domicilio ubicado sobre la calle 27 entre 44 y 46 de la colonia San Francisco de esta ciudad, en un momento dado los vecinos escucharon varios ruidos y gritos que provenían de la casa del ahora occiso y al asomarse a una de las ventanas se percataron que un sujeto forcejaba con el señor Ávila Álvarez, agiotista2a quien le propinaba varias puñaladas en el cuerpo y la cara.

Trató de defenderse con una sartén, pero no pudo hacer nada, ya que después de recibir las apuñaladas cayó al piso pidiendo auxilio.

Durante el forcejeo dos mujeres salieron del predio, una se adelantó y la otra se quedó esperando al malandrín muy cerca del lugar del homicidio, el sujeto, al ver que fue descubierto por un vecino, salió de la casa apresuradamente.

Por su parte, los paramédicos de la ambulancia 21-PC, al mando de José Solano y Joaquín Burgos, checaron al lesionado y se percataron que no tenía pulso e indicaron sus familiares que el señor ya había fallecido.

Se supo que el señor a altas horas de la noche recibía a jóvenes en su domicilio, a fin de pasar un rato agradable con ellas, de modo que se sospecha de tres personas, un hombre y dos mujeres. En el lugar se comentó que los agresores se llevaron un botín de aproximadamente 40 mil pesos en efectivo.

La policía se internó en los montes de Izamal y buscó por todas partes, pero el intento fue infructuoso.