MÉRIDA.- Luego de que la Canacome hizo un llamado a la Comuna a poner fin al comercio informal, el alcalde Mauricio Vila Dosal aseguró que la solución al ambulantaje en la capital yucateca corresponde a los tres órdenes de gobierno.

En entrevista, Vila Dosal respondió, tratando de quitarse la responsabilidad del crecimiento del ambulantaje, principalmente por chiapanecos que venden dulces y cigarros, y otros artículos de su estado en la capital yucateca.

El primer edil dijo que en el ambulantaje se presumen muchos delitos, como es la procedencia ilegal de la mercancía, como es la posible trata de personas y el comercio informal en las calles.

Sin embargo, el ambulantaje se ha disparado en toda la ciudad, por los cuatro puntos cardinales y si hay un vendedor en la calle es porque la Comuna lo permite, ya sea con permiso oficial o por debajo del agua, con mordidas, como lo creció José Collado Soberanis a niveles insospechados.

“Nosotros hemos respondido que estamos en la mejor disposición de sentarnos con el gobierno federal y estatal, para poder definir cuáles son las estrategias y acciones que tenemos que realizar entre todos para poderle poner un freno a este ambulante foráneo”, indicó.

Agregó, reduciendo el problema sólo a los chiapanecos cuando es mucho más amplio y solapado por funcionarios municipales, que se trata de un tema delicado porque normalmente son mujeres que proceden del estado de Chiapas y que andan por las calles con sus hijos, porque no tienen donde dejarlos y muchas de ellas tienen amparos para poder vender en las calles meridanas.

“Como son amparos otorgados por el Tribunal de lo Contencioso estatal hace que la situación sea complicada. Por ello, desde mi punto de vista, para poder solucionar este tema necesariamente tenemos que estar juntos los tres niveles de gobierno”, indicó.

El problema del ambulantaje casi se extinguió en la administración de Manuel Fuentes Alcocer, quizás lo único bueno que hizo en tres años, ya que es lo único que presume.

Con César Bojórquez repuntó porque el subdirector de mercados fue el nefasto José Collado Soberanis, con Angélica Araujo se multiplicó y ni se diga con Renán Barrera Concha, ya que Collado volvió a la “mina de oro”.