PROGRESO.- Una “brillante” idea de policías municipales causó ayer un tremendo caos vial a la entrada de la ciudad, ya que los uniformados cerraron un tramo de la calle 78 con 33, para que se reparara una fuga de agua potable, en lugar de cerrar sólo un carril.

 

Según los uniformados, la decisión de cerrar la calle fue para que los fontaneros del Sistema Municipal de Agua Potable (Smapap) pudieran trabajar con seguridad.

Una larga fila de vehículos se formó desde el puente del distribuidor vial,  en la entrada de la ciudad hasta la 35, que se prolongó de hasta la 35 con 80 y 82, pues los vehículos fueron desviados al poniente para que entraran al puerto.

La fuga de agua fue causada por la ruptura de la tubería de asbesto, y para repararla los trabajadores del Smapap abrieron una zanja; al principio no cerraron la arteria de la 78 de modo que los vehículos entraban, pero lo hacían en doble fila y los fontaneros quedaban expuestos a ser atropellados.

Los trabajos comenzaron poco después del mediodía y el tramo de la 78 entre 33 y 35 fue cerrado a partir de las tres de la tarde. El congestionamiento vial se registró desde las 6 de la tarde, hora en que numerosos vehículos entraban a la ciudad y se toparon que al llegar a la 35 eran desviados al poniente para después dar un rodeo para entrar a la ciudad y dirigirse al malecón.

Los trabajadores del Smapap indicaron que la reparación de la tubería terminaría a las 11 de la noche.

La situación se complicó en la entrada del puerto en el puente del distribuidor vial por los vehículos que se dirigían a la terminal terrestre de contenedores, donde se abordaban los autobuses para trasladarse al concierto de Moderato y Camila que se dio en la terminal remota.