MÉRIDA.- Rudy Euán Bonilla encontró ayer en la madrugada a un niño de año y medio de edad, quien estaba solo cerca del anillo Periférico, a las cuatro de la mañana, cerca del puente de la calle 65, en el oriente de la ciudad.

 

El sujeto halló al niño luego que un camión lo rebasó y prendió las luces altas, de modo que vio al infante a un costado del camino que se une al Periférico.

“Me asombré, me detuve y tras de mi lo hicieron otros dos vehículos. Eran como las cuatro de la mañana”, indicó.

Según dijo el niño temblaba y no estaba seguro si caminaba o no, sino que lo primero que hice fue abrazarlo, tratar de tranquilizarlo porque se notaba que había llorado mucho.

Con agua que tenía en la camioneta le lavé la cara, noté que tenía como raspones o arañadas. En las manos tenía huellas como moretones, creo que estuvo amarrado, dijo Euán Bonilla.

Una mujer, que se identificó como Eleonor Espadas, se acercó y habló a la policía.

El niño es de tez clara, pelo lacio, delgado y sólo tenía “un sport blanco” y su pañal desechable. A lo sumo tendría año y medio.