PROGRESO.- El crucero turístico Carnival Liberty llegó procedente de Cozumel, con 3,676 pasajeros, de los cuales la mitad se quedó en el malecón y notaron la diferencia de la isla caribeña con este puerto, pues en esta ciudad hay pocos atractivos, es un lugar pequeño, pero que lo vieron tranquilo.

La familia Torres, originaria de Zacatecas, pero que radica en Houston, Texas y viajó en el crucero Carnival Liberty, disfrutó de granizados en el malecón, en donde se concentraron los demás pasajeros que llegaron en el barco de recreo, quienes se mezclaron entre los paseantes locales.

La primera en llegar al malecón fue Josefina Torres, quien se detuvo al lado de un vendedor de granizados, el ambulante pensó que se trataba de una paseante nacional y le sirvió un vaso del producto. Después llegaron el esposo José Torres y los niños Jonathan y Valeria que también compraron sus granizados.

Al rato llegaron los tíos Jeremías de la Fuente García y Rosa María de la Torre Soto, quienes viven en Zacatecas y viajaron a Houston para realizar el viaje en crucero, con sus sobrinos que residen en Estados Unidos.

Josefina, quien desde hace 28 años vive en Houston y cuyo esposo se dedica a la construcción de casas de madera, comentó que en donde radican los raspados los venden a dos dólares; en el malecón vio que los vendían (granizados) a $10, toda su familia los consumió.

Los pasajeros se mezclaron entre los paseantes locales que llegaron al puerto poco antes del mediodía; ocuparon palapas de la playa y contrataron servicios de masaje y tatuajes, en cambio los visitantes se metieron al mar para bañarse, otros se sentaron en la arena donde comieron pescado frito y botanas que trajeron.