PROGRESO.- Las protestas y plantones son el único camino que el alcalde José Cortés Góngora le ha dejado al ciudadano para dejarse escuchar, porque el primer edil se cierra y no escucha al pueblo y que pocas veces que se logra hablar con él se muestra tal como es: grosero y prepotente, afirmó.
Frank García Gómez, presidente de la Unión de Locatarios del Mercado Municipal.
A su vez, Oziel Nicoli Argüelles, comisario ejidal de esta ciudad, anticipó que habrá más protestas en contra del alcalde, porque hay inconformidad generalizada, de modo que ya no sólo son los recolectores de basura, a quienes dejarán sin trabajo cuando concesionen el servicio, ni las masajistas y empleados municipales despedidos, sino también están los vendedores a quienes les han aumentado las cuotas de derecho de piso.
En relación con la violenta protesta que lideresas priistas, masajistas, recolectores de basura y ex empleados municipales realizaron el viernes pasado por la noche, durante la celebración del 145 aniversario de la fundación de la ciudad, dos dirigentes y el párroco de este puerto opinaron al respecto.
Oziel Nicoli señaló que no asistió a la sesión solemne de Cabildo del viernes por la noche, pero se enteró de los acontecimientos que derivaron en violenta protesta capitaneada por varios de los traidores que llevaron al poder al alcalde José Cortés Góngora.
-Aclaro que soy amigo de José Cortés, pero anticipo también que habrá más protestas en contra del alcalde porque hay inconformidad generalizada, ya no sólo son los recolectores de basura ni las masajistas y empleados municipales despedidos, sino también los vendedores a quienes les han aumentado las cuotas de derecho de piso –dijo.
Un ejemplo del aumento desmedido de los derechos de piso, continuó Nicoli, es que a los que tienen puesto de Food Trucks en el malecón este año les van a cobrar $25,000, cuando el año pasado en el verano les cobraron a $15,000.
“Eso es un abuso y finalmente los consumidores (locales y visitantes) serán los que paguen ese aumento de cuotas del alcalde, además de que dirán que en Progreso todo es caro”, precisó el entrevistado.
Nicoli Argüelles señaló que el alcalde no da la cara, no atiende al pueblo, ya que le hace falta quehacer político y sería bueno que se deshaga de los malos asesores que tiene y se rodee de asesores positivos que lo orienten para que las acciones que tomen sean por el bien del pueblo, porque con los problemas que se suscitan, no hay inversiones y el puerto se queda estancado, no hay avances.
Frank García Gómez, presidente de la Unión de Locatarios del Mercado Municipal, señaló que las protestas y plantones es el único camino que el alcalde le ha dejado al ciudadano para dejarse escuchar, porque José Cortés se cierra y no escucha al pueblo y que las pocas veces que se logra hablar con él se muestra tal como es, grosero y prepotente.
El líder de los locatarios recordó en el último plantón que hicieron los recolectores de basura (16 de junio) él formó parte de la comisión que se reunió con el alcalde, de modo que comprobó la prepotencia de José Cortés, quien en forma grosera la respondió a Javier Góngora Domani, presidente de la Croc municipal, cuando éste le preguntó al edil qué haría si privatizaran sus barcos.
-El alcalde le dijo a Javier Góngora, el que se meta con mis barcos le rompo la madre; yo lo escuché, no me lo contaron, por eso afirmó que el alcalde es prepotente y grosero, y que el único camino que deja al ciudadano es la protesta y estoy seguro que seguirán las manifestaciones de inconformidad.
No era el momento de protestar, dice al padre Francisco Mukul
El párroco de la Purísima Concepción y San José, presbítero Francisco Mukul Domínguez, señaló que la protesta no se hizo en el momento adecuado, pues la noche en que protestaron se celebraba el aniversario de la fundación de la ciudad.
El padre Mukul Domínguez fue invitado a asistir a la sesión solemne de Cabildo por el 145 aniversario de la ciudad, pero ofició misa de 8:30 de la noche por la graduación de egresados de la preparatoria Progreso, de modo que cuando concluyó la ceremonia religiosa decidió cruzar el parque para asistir al evento, pero vio que las personas se retiraban y escuchó gritos y ruido de sillas.
Varias personas que se retiraban del parque le dijeron que había una protesta en contra del alcalde, que no le permitieron leer su discurso y por el escándalo tampoco se pudo entregar la medalla Juan Miguel Castro al ciudadano distinguido (José Javier Guadalupe Quezada Euán), de modo que el padre Mukul retornó a su parroquia.
En opinión del párroco, todas las personas tienen libertad para manifestarse como lo deseen, por los motivos que tengan para hacerse escuchar por las autoridades, pero que el viernes 1 pasado, no fue el momento adecuado para la manifestación porque se celebraba el aniversario de la ciudad.
-La parroquia no está en contra de la manifestación de las personas, pero consideró que no fue el momento, ya que mucha gente de fuera vino a la ciudad para asistir al festejo del aniversario y a presenciar la actuación de la orquesta Típica Yucalpetén, lo que finalmente no vieron porque se suspendió -dijo.
El padre Mukul consideró que ante todo debe prevalecer el diálogo para el bienestar de la comunidad.