TAIWAN.- Después de recibir muchas críticas en línea por haber tenido que matar de 700 perros en su trabajo, Jian Zhicheng, una veterinaria que trabajaba en el Parque de Educación y Protección Animal en Taiwan se suicidó con la misma droga con la que le practicaba la eutanasia a los animales en el lugar de trabajo.

De acuerdo con los reportes, la mujer se sentía deprimida por tener que acabar con la vida de los perros, pero parece que la reacción en línea después de que tuvo una aparición en televisión fue demasiado para ella.

“La vida (humana) no es diferente de la de un perro; yo moriré por las mismas drogas que usamos para poner a los perros a dormir apaciblemente”, escribió en una carta antes de inyectarse.

En su momento, en una entrevista para una cadena televisora, ella manifestó que el refugio estaba completamente lleno, y que normalmente se veía forzada a dormir a perros callejeros después de 12 días si no eran adoptados.

La veterinaria Jian Zhicheng, en su primer día de trabajo, se durmió llorando por la culpa de tener que matarlos. A pesar de sus aparentes buenas intenciones, los usuarios en línea la llamaron “carnicera” y la “verdugo hermosa”.

No pudo soportar tal presión y sufrimiento, de modo que tomó la fatal decisión de suicidarse; hasta el momento el Parque de Educación y Protección Animal en Taiwan no ha ofrecido un motivo de las causas.