SAN FRANCISCO.- Un camión de 18 ruedas que avanza por una carretera con 36 toneladas de carga sin que haya una persona al volante puede parecer una idea descabellada, incluso en momentos en que hay decenas de vehículos autónomos de Google que recorren calles de California, Texas, Washington y Arizona sin chofer.

Pero Anthony Levandowski, un ingeniero que ayudó a promover la tecnología de los vehículos autónomos en Google, está convencido de que los camiones con pilotos automáticos ayudarán a hacer que las carreteras sean más seguras.

Levandowsky dejó Google junto con otros dos compañeros , Lior Ron y Don Burnette, para fundar este año la firma Otto, un startup de San Francisco en la que también reclutó a la experta en robótica Claire Delaunay.

Como los aviones

El objetivo es equipar los grandes camiones con software, sensores, lásers y cámaras para que puedan manejarse solos en las carreteras ,mientras un humano duerme en la litera de la cabina o se ocupa de otras cosas.

Por ahora los camiones experimentales se manejan solos en las carreteras y los humanos toman el volante en las ciudades. Es un concepto similar al de los aviones que usan el piloto automático a grandes alturas y son controlados por los humanos en el despegue y el aterrizaje.

“La idea es hacer que los camiones funcionen de la forma más humana posible, pero con la confiabilidad de las máquinas”, expresó Levandowski, quien ya desarrolló y probó exitosamente su primer prototipo.

Es posible que pasen décadas antes de que este proyecto se haga realidad a pesar de los progresos logrados en los últimos cinco años en el terreno de los vehículos autónomos, sostuvo Steven Shladover, del programa Partners for Advanced Transportation Technology, de la Universidad de California, quien opina que la tecnología no está lo suficientemente desarrollada como para que los reguladores le confíen el manejo de un camión.

“No quisiera estar en una carretera cuando no hay nadie al volante de un camión con 36 mil kilos de carga y no creo que nadie quiera estar allí tampoco”, manifestó Shladover. “Las consecuencias de cualquier tipo de falla serían demasiado graves”.

Los vehículos autónomos de Google han recorrido más de 2 mil 500 millones de kilómetros sin tener accidentes que ocasionaran muertes o lesiones graves. De la veintena de incidentes en que se vieron envueltos esos autos, la empresa asumió la responsabilidad de solo uno, un choque con un autobús ocurrido en febrero en Mountain View, California.

Mayor seguridad

Levandowski asegura que no hay que tenerle miedo a los camiones autónomos, pues dice que habrá menos probabilidades de que se excedan de velocidad o de que sigan manejando en condiciones que no son seguras. Además, nunca se cansan.

En Estados Unidos, hasta 20 por ciento de los 4 mil accidentes fatales que involucran a camiones y autobuses todos los años son producto de la fatiga del conductor, según cálculos de las academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina.

Además Levandowski lleva más de una década trabajando en esta tecnología, ya que empezó en 2004 con una motocicleta autónoma llamada Ghostrider, que se encuentra ahora en el Museo Nacional Smithsoniano de Historia.

El ingeniero también diseñó en 2008 el PriBot, un Toyota Prius autónomo que cruzó el puente de la bahía de San Francisco para entregar una pizza en 2008, antes de que Google presentase su flota de vehículos que se manejan solos.

Otto cuenta con 40 empleados con amplia experiencia en los autos autónomos, tecnología que ahora tratan transferir a los camiones de carga.

Creada hace apenas cuatro meses, Otto ya tiene tres camiones enormes con tecnología para funcionar en forma autónoma y completó el pasado fin de semana su primer ensayo en una carretera pública en Nevada.

La empresa busca ahora un millar de camioneros que se ofrezcan como voluntarios para probar camiones autónomos, quienes deberán tomar el control del camión si hay alguna falla o si las condiciones de la ruta lo exigen.

La meta de Otto es ambiciosa: que los 4.7 millones de camiones que recorren las rutas de Estados Unidos tengan tecnología para funcionar en forma autónoma.

La Asociación Nacional de Camioneros no ha fijado una posición en torno a esta tecnología por ahora.

No obstante, “es absurdo tener a una persona al volante de un camión durante ocho horas solo para que se mantenga entre dos líneas”, concluyó Levandowski.

AP.-