MÉRIDA.- Ni tardo ni perezoso, el ladrón confeso Edwin Antonio Sánchez Haas, al saber que iba a ser sentenciado en un procedimiento abreviado, por su participación en un robo perpetrado en la colonia Bojórquez, a principios de año, y huyó con todo y el localizador electrónico.

El ahora prófugo no se presentó a la audiencia de este miércoles, y a su cómplice Irving Diego Manzanero Martínez lo sentenciaron dos años y tres meses de prisión y a al pago de 50 días multa, por el delito de robo calificado, que denunció Samuel Efrén Collí Solís.

La lectura y explicación de la sentencia en contra de Manzanero Martínez estuvo a cargo del juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero.

A su vez, Sánchez Haas tenía como “medidas cautelares”, por un período de cinco meses, presentarse a firmar ante la Unidad de Medidas Cautelares, una vez al mes dentro de los primeros cinco días hábiles; no salir del Estado; no acercarse al domicilio del denunciante; no acercarse al denunciante, y localizador electrónico.

En los primeros minutos del 22 de enero, Irving Diego, junto con Edwin Antonio, ingresaron al predio número  669 de la calle 59 entre 104 y 106 de la colonia Bojórquez. De ahí se robaron un proyector, un estuche con un micrófono y una antena y dos amplificadores. También tomaron cables y otros objetos, propiedad del denunciante.

Sin embargo no llegaron lejos, pues fueron detenidos por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, cuando cargaban lo robado.