PROGRESO.- Tres agentes federales de la Agencia de Investigación Criminal decomisaron ayer martes unas 2,000 películas “pirata”, las cuales fueron retiradas de los anaqueles colocados fuera y en el interior del establecimiento.

Los agentes colocaron las películas apócrifas en bolsas y después las subieron a una camioneta. Durante el sorpresivo operativo, que se realizó a las 10 horas, no estuvo el dueño o encargado del negocio que no tiene nombre.

Los federales llegaron en una camioneta F-50 color blanca  y sin logotipo, con placas  YP-27-470, la cual estacionaron en la calle 29 con 80 y de inmediato entraron a un negocio donde venden películas pirata y procedieron a su decomiso.

Encargados de otros establecimientos y personas que pasaban por la céntrica calle comentaron que el negocio en el que confiscaron las películas apócrifas es “cliente de los federales”, pues siempre le confiscan el material pirata, pero que a los dos días vuelve a abrir  con más películas.

Los agentes no hicieron comentario alguno sobre el operativo y el decomiso duró media hora y después se retiraron.

Otros negocios que se dedican a la venta de películas pirata, instalados en otras calles del centro de la ciudad, fueron cerrados de inmediato cuando sus encargados se enteraron que estaban los federales decomisando material apócrifo.