CIUDAD DE MÉXICO.- El agricultor de origen maya, Nemesio Magaña Dzul, decidió, con su familia, rescatar más de 50 variedades de plantas de uso medicinal para consumo personal; sin embargo, 10 años después, la iniciativa se convirtió en un negocio creciente.

En entrevista, el agricultor y ahora fortuito empresario explicó que él y su familia son originarios del municipio de Homún, ubicado a poco más de una hora de viaje desde la capital yucateca, en donde tienen su zona de cultivo y producción.

La idea de rescatar y preservar las plantas de uso medicinal surgió porque su madre Liboria Dzul Chin, prácticamente los curaba a él y a sus hermanos con el uso de plantas medicinales con las cuales hacía infusiones y otros remedios que para él eran muy efectivos.

En ese entonces, cuando éramos niños, no había doctores disponibles en nuestro pueblo y mi mamá nos curaba con hierbas y así estuvimos durante muchos años, por lo que el uso de esos métodos para curarnos se volvió parte de nuestras vidas”, subrayó Nemesio Magaña.

Por ello, en un terreno ubicado en su natal Homún decidieron plantar las más de 50 variedades de plantas que usaba doña Liboria y lo que empezó como una labor de rescate empezó a convertirse en un negocio formal al que bautizaron como “Productos Maya, Medicina Tradicional”, donde también participa su esposa María Elena Cobá.

El negocio familiar ya cumplió 10 años de operaciones, debido principalmente a que existe una buena demanda de los productos que elaboran y además de que ofrecen buenos resultados a quienes los consumen de manera regular, precisó el entrevistado.

Refirió que sus productos de medicina tradicional están hechos para tratar desde un simple resfriado hasta ayudar al control de enfermedades consideradas peligrosas para la salud como la diabetes y el colesterol alto.

De igual modo, es posible conseguir tratamientos para ayudar a deshacer cálculos renales y hasta para aliviar problemas con la próstata, entre otras enfermedades consideradas complejas y cuyo tratamiento en hospitales es altamente costoso.

Sin embargo, Magaña Dzul aclaró que la medicina tradicional maya también requiere de la voluntad y la perseverancia de quien la usa para poder llevar el tratamiento tal y como se requiere, pues de lo contrario al igual que sucede con la medicina alópata, el tratamiento puede no dar los resultados esperados.

Asimismo, anotó, es importante que en algunos casos la gente entienda que no sólo se trata de usar la medicina maya, pues por ejemplo para un diabético de nada le servirá usarla si no cambia su dieta y sigue consumiendo altas cantidades de grasas y azúcares. “Contra eso no hay medicina que pueda curarte”, finalizó.

EXCELSIOR.-