ESTADOS UNIDOS.- Durante su visita a Disneylandia antes de su accidentada participación en los Grammy, la cantante británica Adele fue fotografiada paseando a su hijo Angelo, de tres años, vestido como una de las princesas de Frozen.

La estrella de la música está acompañada por su pareja, Simon Konecki.

El niño está sentado en su cochecito y luce el vestido amarillo y los zapatos de Anna, uno de los personajes de la exitosa cinta de animación.

Con este gesto, Adele demostró que educa a su hijo con libertad y sin prejuicios sobre la orientación sexual de las personas.

Las imágenes fueron bien recibidas tanto en los medios como en las redes sociales.

En una entrevista de portada de la revista Time de diciembre de 2015, la intérprete de “Hello” ya había dejado en claro que, sin importar lo que su hijo quiera hacer de grande o cuáles sean sus preferencias sexuales, ella estará incondicionalmente: “No puedo esperar a ver quién será su mejor amigo, quién será su novia, o su novio, o qué películas le gustará.

Lo que sea que mi hijo quiera ser o hacer, siempre lo apoyaré, sin importar qué”.

INFOBAE.-