SAN CRISTOBAL.- El Papa Francisco criticó el despojo de tierras y la exclusión que miembros de pueblos indígenas han sufrido históricamente.
En el mensaje que ofreció durante la misa en San Cristóbal de las Casas, el pontífice llamó a ofrecer perdón por el despojo y la segregación de la que han sido víctimas los miembros de pueblos originarios.
“Muchas veces de modo sistemático han sido incomprendidos y excluidos de la sociedad. Algunos han considerado inferiores sus valores. Otros los han despojado de sus tierras o han realizado acciones contaminándolas. Qué tristeza.
Perdón, hermanos, que el mundo de hoy despojado por la cultura del descarte lo necesita a ustedes” dijo el Papa.
En su mensaje, Francisco reconoció que los miembros de los pueblos indígenas serán quienes deberán enseñarle a la humanidad tener una relación armónica con la naturaleza, en tiempos actuales con crisis ambientales.
“Ya no podemos hacernos los sordos frente a una de las mayores crisis ambientales de la historia. En esto ustedes tienen mucho que enseñarnos, son pueblos que, cómo han reconocido los obispos de América Latina, saben relacionarse armónicamente con la naturaleza, a la que respetan como fuente de alimentos, casa común y como altar del compartir humano”, dijo el pontífice ante miles de miembros de los pueblos tzotziles, tzetzales y choles.
Durante la homilía, el pontífice explicó que el mundo necesita a los jóvenes para lograr un mejor futuro.
“El mundo de hoy, custodiado por la cultura del descarte, los necesita a ustedes. Jóvenes expuestos a una diversidad culturales en pos de un mundo homogéneo. Necesitan los jóvenes que no se pierda la sabiduría de sus ancianos. El mundo de hoy, preso del pragmatismo, necesita reaprender el valor de la gratuidad”, detalló.
En el lugar, miles de personas portaban banderines, globos e imágenes de la Virgen de Guadalupe. Previo a la misa, un grupo de músicos con marimbas amenizaron la espera de los feligreses.
Para llevar a cabo la liturgia, frente al altar en el Centro Deportivo Municipal se acondicionó una réplica de la Catedran de San Cristóbal.
La primera lectura, del libro de Levítico, fue leída por una mujer en lengua chol. Los salmos fueron compartidos en lengua tzotzil y el Santo Evangelio según San Mateo se leyó en lengua tzetzal.
El Papa pidió que, a través de las oraciones, fueran aprovechadas las prácticas cuaresmales por los fieles.
La tercera de las misas que ofrece el Papa Francisco en su visita a México se lleva a cabo ante una audiencia de miles de personas congregadas en el Centro Deportivo Municipal de San Cristóbal de las Casas.
La mayoría de los asistentes son miembros de pueblos indígenas tzotziles, tzetzales o choles, los cuales desde la madrugada de este lunes se congregaron en San Cristóbal para atender la eucaristía.
Al final de la misa le fue entregada al Papa Francisco una biblia traducida a lenguas indígenas. En tzotzil, los índigenas Miguel y Martha, le agradecieron a nombre de los pueblos indígenas de Chiapas y de Guatemala por su visita a la diócesis de San Cristóbal de las Casas.
MILENIO.-