MÉRIDA.- Los hijos no son culpables del divorcio de sus padres, pero si pagarán las consecuencias del cambio a las leyes yucatecas, ya que ahora ya no es grave el delito de sustracción de menores, de modo que amparado en eso Carlos Zapata Ortiz se llevó a su hijo y mandó a freír bolas al juez que lo citó, pues no se presentó a la audiencia de vinculación.

Acusado del delito de sustracción de menores, este sujeto, que se llevó a su hijo desde abril de 2015 y no se lo devolvió a la mamá del menor, ha demostrado que la “justicia” le hace lo que el viento al flamboyán.

Ante la inasistencia de Zapata Ortiz, el Juez Segundo de Control lo declaró prófugo de la justicia, de modo que ahora podría ser obligado a comparecer por medio de la fuerza pública, pero sólo para vincularlo a proceso, ya que seguirá feliz y campante en la calle y cuando mucho le pondrían una ridícula multa o un brazalete electrónico.

La audiencia de vinculación debió de efectuarse ayer viernes, a las diez de la mañana, pero no se desarrolló, ya que el individuo no se presentó, con el argumento de que en su trabajo no le dieron permiso.

Fue citado para comparecer por la denuncia de sustracción de menores presentada por su ex pareja sentimental.

El nuevo sistema de justicia penal no considera dicho delito como grave y, por tanto, fue citado hace más de una semana a comparecer para que dicho juez le informe los pormenores de la causa que se sigue en su contra, pero simplemente no se presentó.